El gobernador Antonio Bonfatti apeló a un hombre de estrecha confianza y conocimiento para reemplazar a Miguel Angel Cappiello al frente del Ministerio de Salud. Ayer dio a conocer que el nuevo ministro es el casildense Mario Drisun, que desde hace dos años integraba el gabinete municipal de Santa Fe, como secretario de Salud.

"Vendrá alguien que conoce bien el ministerio", había anticipado el nuevo concejal socialista en Rosario acerca de su sucesor. Ambos habían compartido el miércoles un acto por el 57º aniversario del hospital Vera Candioti, en la capital provincial, pero disimularon lo que Bonfatti ya le había planteado al intendente José Corral. Socialista por socialista, el arribo de Drisun a la cartera de Salud es visto por testigos cercanos a la cocina del gobierno como una movida lógica, habida cuenta del currículum del nuevo funcionario que retorna al gabinete de la Casa Gris.

Drisun es médico clínico, egresado de la Universidad Nacional de Rosario, y magíster en Salud Pública por el Instituto Lazarte. Su carrera política asomó en 1983, cuando fue electo concejal en Casilda, donde llegó a presidir ese cuerpo deliberante. Fue intendente de esa ciudad en 1985, y arribó a Rosario en 1996, cuando Hermes Binner lo convocó para que asumiera como director de Servicios de Salud, en la secretaria municipal. Desde aquel momento trabajó siempre cerca del por entonces intendente rosarino. Entre 2000 y 2003 se desempeñó como subsecretario de Salud Pública de Rosario. En 2005 ocupó la secretaría del bloque de diputados socialistas de la provincia, y dos años más tarde resultó electo como tal en la nómina que acompañó a Binner como gobernador. Su desempeño legislativo estuvo vinculado a asuntos de salud pública, incluso llegó a presidir la comisión específica de Diputados.

En 2009 renunció a su banca para ir a trabajar junto a Bonfatti, cuando el actual gobernador era el ministro político de Binner. Fue entonces el secretario de Gobierno de la provincia, hasta 2011, cuando el nuevo intendente santafesino, Corral, requirió a la mesa chica del Frente Progresista un referente que pudiera generar gestión en salud desde ese municipio, históricamente prohijado por el Ministerio de Salud de la provincia. En eso estuvo Drisun desde entonces hasta ayer, cuando aceptó el nuevo destino que le encomendaron y mudó otra vez de escritorio.