Para el diputado nacional Hermes Binner, el narcotráfico es el "flagelo" que aflige a todo el país, no solo Santa Fe. El dirigente lo consideró un problema "muy serio", en el que "se hace poco por investigar las cosas como deben ser". La venta de estupefacientes de manera ilegal es "un problema regional" para el ex gobernador. "No creamos que los países que están cerca de Argentina se van a salvar de esta situación", dijo, al cerrar el seminario "Los desafíos de la izquierda democrática", actividad convocó a representantes los partidos socialistas de Chile, Uruguay, Paraguay y España. A su lado, el gobernador Antonio Bonfatti, mucho más contundente, pegó duro al sostener: "No negociamos ni transamos, estamos firmes en cambiar la realidad. Es mucho más fácil hacer pactos espurios y que las cosas se tranquilicen".

El evento se realizó durante toda la tarde en el hotel Savoy. Se propuso trabajar el rol de la izquierda en la región, "teniendo presentes los desafíos que debe enfrentar América Latina en términos de desigualdad social". En ese sentido, tanto Binner como Bonfatti eligieron hablar de "violencia" y "narcotráfico" como factores consecuentes de la brecha social. Antes de ellos, la encargada de iniciar la jornada, pasado el mediodía, fue la intendenta Mónica Fein. Luego, intervinieron representantes del socialismo de habla hispana como el diputado español del PSOE Juan Moscoso; el ex embajador chileno en Argentina Luis Maira (PS Chile); el secretario general del PS de Uruguay, Eduardo Fernández; y el senador paraguayo Alberto Grillón (Partido País).

Binner reconoció también la existencia de una "gran agresividad en el seno de la población", la que adjudicó a una desigualdad social "muy importante", como quedó reflejada "en los valores que dio el Observatorio Social de la Iglesia". Al mismo tiempo, y en sintonía con gran parte de la dirigencia santafesina, condenó "esta forma de juicio por mano propia", encomiando a poner esfuerzos en "crear una sociedad civilizada, donde haya una justicia clara". Para el presidente del socialismo, hechos como el linchamiento y asesinato de un joven tras robar una cartera, obedecen a "una inseguridad generalizada". "Uno abre un diario o prende la televisión y encuentra un hecho de sangre rápidamente, de distintos niveles y lugares. Hay una acostumbramiento a la sociedad a ver tantas situaciones que son aberrantes", analizó.

El ex candidato a presidente habló de "enfrentamiento ciudadano", escenario que se tiene que "frenar en Argentina" de manera "prioritaria". A la vez, pidió "avanzar en el país en una cultura de paz, no de guerra". Una de las razones - para Binner - por las cuales Argentina atraviesa una "profunda brecha social" es la "gravísima" concentración económica, que se repite "en el mundo", donde "pocas personas son dueñas de la mitad de la riqueza del mundo". Para el legislador, "es un hecho que agravia a la democracia" y "no hay posibilidad de salir adelante con esta desigualdad".

"Argentina tiene toda una historia de paz, de seguridad, de ascenso de los sectores sociales, de inclusión social. Hay que diferenciar entre el crecimiento económico y el desarrollo social. No son cosas iguales. Argentina tiene en esto una grave responsabilidad. Si no se atiende a la pobreza y a la exclusión, los días que le esperan a Argentina no serán verdaderamente buenos. Necesitamos trabajar en la inclusión de los argentinos, terminar con estos diez millones de pobres en el país. Esto choca con las expresiones que tienen mucho poder económico", ahondó el ex mandatario provincial, arrancando un puñado de aplausos.

Por su parte, Bonfatti advirtió que la coyuntura que más aflige "es el tema de la violencia". "En esto no vamos a torcer el brazo, más allá de aquellas noticias amarillas que recorren los medios de comunicación todos los días. Vamos a seguir adelante, en poco tiempo vamos a dar un cambio sustancial en la provincia. Muchos nos van a mirar como un espejo, hay cosas que hoy no trascienden por la coyuntura", aseguró el gobernador.