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Desde Santa Fe.

Uno de los puntos que se ventilan en el juicio es la relación entre Hugo Tognoli y José Luis Baella, desde que el primero era jefe de Drogas Peligrosas y luego, cuando llegó a jefe de Policía de la provincia, a fines de 2011, en el gobierno de Antonio Bonfatti. El Ministerio Público considera que Baella "jamás pudo haber actuado en soledad" en el supuesto "encubrimiento" a Daniel "Tuerto" Mendoza y por lo tanto, uno de los elementos que valora son las promociones de Tognoli a Baella y cómo se intercalan en la investigación de los hechos.

Tognoli asumió en Drogas Peligrosas en enero de 2008, en la gestión de Hermes Binner y al año siguiente, en mayo de 2009, designó a Baella jefe de Patrullas Móviles por "la capacidad e idoneidad demostrada", dijo. "En la práctica, esto significó que Baella formara parte de la Dirección General comandada por Tognoli", interpretó el Ministerio Público.

"El efectivo conocimiento y especial ponderación que Tognoli tenía de Baella se vio reflejada en mayo de 2010", cuando el jefe de Drogas "felicitó" por escrito a su subordinado por "intervenir en un procedimiento, donde se secuestraron tres kilos de cocaína negra. Y luego, en enero de 2011, cuando nombró a Baella subjefe de Inteligencia Zona Centro, con la retención del cargo anterior, de jefe de Patrullas Móviles.

"La relación que tuve con el comisario Baella fue de superior a subalterno y en una institución pirmidal como la Policía, por lo general uno habla con el jefe y no con los subjefes", dijo Tognoli en su indagatoria.

"Al hacerme cargo de la dirección de Drogas, el 2 de enero de 2008. Baella era subjefe de de Inteligencia Zona Centro. En 2009, fue trasladado como subjefe de la Brigada Operativa del departamento Castellanos y luego (en mayo de ese año) fue designado jefe de Patrullas Móviles que estaba vacante", explicó. "Fue una designación interina, pero esto no significó ningún ascenso para Baella, que seguía dependiendo del jefe de Operación y debía realizar dos funciones por el mismo sueldo".

Tognoli dijo que el elogio a la "capacidad e idoneidad" de Baella para fundar la designación como jefe de Patrullas Móviles era un "formulismo" que se utilizaba en otras promociones. Y justificó la "felicitación" de Baella en 2010 por el "secuestro de tres kilos de cocaína negra" por la "trascendencia pública" del hecho.