1 Godoy Cruz: Rey; Olivares, Galeano, Ortiz; Ceballos, Zuqui, Silva, Zárate; Díaz, Ayoví, Fernández. DT: Gabriel Heinze.

3 Central: Caranta; Salazar, Donatti, Pinola, Villagra; Montoya, Domínguez, Fernández; Lo Celso; Larrondo, Ruben. DT: Eduardo Coudet.

Goles: PT: 10m Ruben (C), 19m Larrondo (C). ST: 7m Fernández (C), 32m Leandro Fernández (GC).

Cambios: ST: Desde el inicio Mercado por Ortiz (GC), 25m Colman por Lo Celso (C), 33m Niell Por Larrondo (C), 38m Burgos por Galeano (GC), 43m Musto por Fernández (C).

Arbitro: Andrés Merlos.

Cancha: Malvinas Argentinas.

Los motivos de por qué Central pelea por el título se pueden encontrar, como buena síntesis, en el partido que ayer el canaya ganó por goleada en Mendoza ante Godoy Cruz. El equipo de Eduardo Coudet ejerció una supremacía total, teniendo las riendas del partido los 90 minutos, haciendo todo muy monótono ante tanto dominio. Un Central amigado con la pelota, hizo grandes goles, con Giovani Lo Celso dando asistencias, Marco Ruben con presencia en el área y gol y Marcelo Larrondo siendo la figura, cumpliendo ambos roles: dio asistencias y marcó su tanto. La victoria mantiene a los auriazules a seis puntos del líder Boca, a quien recibirá en la última fecha del torneo.

Todo lo que pasó en el Malvinas Argentinas fue responsabilidad de Central. Porque Godoy Cruz no pudo reaccionar nunca al dominio de pelota que hizo Central, que lo llevó a administrar todo el campo de juego a su gusto, con volantes tan dispuestos a atacar como a recuperar el balón.

Las diferencias fueron visibles desde el primer minuto. A los cinco, por caso, Lo Celso dejó solo a Ruben frente al arco pero el esforzado derechazo del delantero se fue desviado. Minutos después, Lo Celso asistió a Larrondo, el delantero la bajó de cabeza y Ruben definió pisando el área menor, ahora sin fallar, para poner al canaya en ventaja.

Central no se distrajo por la diferencia. Por el contrario, desplegó su mejor fútbol, avanzando en cada ataque con pases cortos, de primera, hasta el área. El partido no salía del campo de Godoy Cruz, pero el segundo gol llegó de un tiro de esquina, en pelota que no pudo controlar Galeano y Larrondo la encontró a sus pies para definir con todo el arco de frente.

Faltaba tanto por jugar, que no se podía pensar en partido resuelto para Central. Pero lo estaba. El equipo no bajó nunca su velocidad de juego y redujo al local a su mínima expresión, desdibujando todo intento de Godoy Cruz por intentar algo.

A los veinte minutos Central ganaba por dos goles. Desde entonces el equipo jugó en terreno de Godoy Cruz, pero ya no era tan profundo. La diferencia ya no tenía a Central tan interesado por el gol, incluso a pesar de las torpezas del fondo local. Y por eso el entretiempo fue la oportunidad que encontró el equipo mendocino para revisar ideas y replantear el partido.

Pero ni siquiera eso le dio Central al rival. Porque al comenzar el complemento la ilusión de Godoy Cruz, que dependía de que llegue el gol del descuento, duró solo siete minutos, momento en que el canaya marcó un golazo, con movimiento de pelota de pases levemente hacia atrás, como en el rugby, con Larrondo por derecha abriendo para Montoya, el volante dio pase de primera a Lo Celso, el juvenil la abrió más aún a la izquierda para Fernández, y el ex Godoy Cruz anotó el tercero con zurdazo cruzado a la corrida.

Quedaban por delante casi 40 minutos. El partido perdió interés, incluso para Godoy Cruz, por lo cual Central lo que hizo fue sostener su nivel de juego. En el cuarto de hora final llegó el descuento del local, con fuerte zurdazo de Fernández al primer palo, en jugaba que nació de un lateral, y luego lo perdió Ayoví de cabeza.