El ex presidente de la Cámara de Diputados Luis Rubeo le aportó varios condimentos picantes al tortuoso camino de la recuperación del peronismo en la provincia. En diálogo con Rosario/12, el legislador criticó que la presidenta Cristina Fernández haya conducido como "jefa de la Cámpora y no del movimiento nacional". En el mismo tono, le pegó duro a los cabeza de lista del Frente Para la Victoria en las elecciones legislativas nacionales, Omar Perotti y Marcos Cleri.

--¿Qué análisis traza de la actualidad del PJ de Santa Fe?, preguntó este diario.

--Lo que tiene que hacer el peronismo en la provincia es empezar un proceso serio de reflexión interna que genere una construcción que termine con las conducciones de acuerdo. La experiencia indica que se ha venido fracasando, que son conducciones legítimas porque tienen la representatividad política, pero no tienen la legitimidad que te da el voto del afiliado. Para mí, tenemos que partir hacia una conducción de ese estilo, que tenga más amplitud, que recorra los territorios, darle participación a esos cientos y cientos de militantes, adherentes y simpatizantes que estuvieron trabajando para el 22 de noviembre por encima de los dirigentes tradicionales. Y si no buscamos canales de participación, se van a perder.

--¿Los resultados provinciales que lo tuvieron a Perotti muy cerca de ser gobernador y luego ganador en la legislativa, lo colocaron como líder del peronismo?

--Hace tiempo que vengo diciendo que hay dirigentes que tienen vocación de candidato y hay dirigentes que tienen vocación por la conducción colectiva. En ese sentido, creo que los votos que se sacaron en las últimas elecciones fueron del esfuerzo de todo el conjunto del peronismo, y por supuesto los beneficiarios fueron los candidatos. Pero no es un patrimonio exclusivo y excluyente, eso es un patrimonio de todos, porque todos pusimos nuestro granito de arena para hacer la elección que se hizo, que fue muy buena. Si nosotros no hubiéramos demorado en comenzar la campaña a gobernador, no haber esperado tanto tiempo por la aparición de no sé qué figura maravillosa, y si se hubieran convencido muchos de que había que abrir la participación, yo estoy con la certeza de que podíamos haber ganado. Porque la diferencia que nos sacó (Miguel) Lifschitz fue muy escasa.

--¿Corre para Perotti, pero también para Marcos Cleri, que fue el otro ganador en la legislativa de octubre?

--Corre para todos los candidatos. Yo sostengo que si en la elección nacional, que se termina perdiendo por muy pocos votos, si hubiéramos tenido un criterio de mayor amplitud, de mayor generosidad, de mayor participación en las listas nacionales, a lo mejor hubiéramos tenido en los distritos mejores posibilidades de recaudación.

--¿Quién cometió ese error, a su entender?

--La conducción y quienes armaron las listas. La presidenta (Cristina Fernández) se ha manejado con una capacidad notable, con una solvencia y una convicción realmente admirables, yo creo que es un cuadro político que no tiene otro que lo equipare. Pero cuando tuvo que funcionar como jefa del movimiento nacional para construir la arquitectura electoral, no lo hizo pensando en todos. Lo hizo pensando como jefa de una agrupación.

--¿De La Cámpora?

--Exactamente.

--¿Es homogéneo el bloque de Diputados que integra, junto a Leandro Busatto y Olga Coteluzzi?

--Sí, es homogéneo. Además somos los tres que participamos en la construcción de la lista que encabecé. Y tiene una explicación que Busatto sea el presidente del bloque, porque yo soy uno de los dirigentes que sostiene que hay que llevar adelante en las fuerzas políticas un proceso de trasvasamiento, darle la posibilidad a aquellos dirigentes más jóvenes, pero que tienen capacidad probada y que han demostrado militancia, convicción, compromiso y solvencia. Hay que darle la posibilidad de que tengan representaciones con mayor responsabilidad. Por eso Leandro Busatto, que es un dirigente joven del peronismo santafesino, encabeza uno de los bloques.

--¿Es muy difícil que en 2016 se conforme un bloque único entre los diez diputados del PJ?

--Yo creo que sí, que es muy difícil. Porque a mí me separan de algunos dirigentes estilos de construcción política notables. Y además porque hay algunos que no pertenecen a nuestra fuerza.

--¿Quiénes?

--El caso concreto... (Héctor) Cavallero no es una persona que pertenezca al peronismo. Es parte de una alianza. Habría que mirar, lo que sí se pueden establecer son políticas comunes, acuerdos en algunas cuestiones legislativas, llevar posiciones que sean de los diez, pero que estemos dentro de un solo bloque lo veo absolutamente difícil.

--¿Cuál fue el motivo de su salida de la Corriente Nacional de la Militancia?

--Yo entiendo que la Corriente tiene una figura de conducción única y excluyente que es la de la presidenta, y en ese sentido yo creo que nosotros tenemos que darle el rol a Cristina que se merece, que es el de una estadista, de haber conducido los destinos de la República, pero entendemos que ella representa una parcialidad dentro del justicialismo, y yo no me sentía representado por esa conducción. Y entonces lo que tengo que hacer es alejarme.

--¿Quedó algún resquemor con el ex ministro Agustín Rossi, líder de la Corriente?

--No, absolutamente ninguno. Todo lo contrario, un profundo cariño y respeto en lo personal, pero políticamente tenemos derecho a pensar distinto. Una de las cuestiones que digo en la construcción del peronismo de la provincia es que no puede ser que aquellos que piensan distinto directamente haya que excluirlos o tildarlos de traidores. El peronismo siempre ha sido una fuerza política que ha tenido posibilidades de disenso interno, pero con conducciones que representan a la totalidad del movimiento.

--¿En el futuro cercano se lo verá a usted dentro de otra agrupación peronista?

--No, no. Voy a seguir trabajando en la Legislatura, haciendo lo que vine haciendo estos últimos cuatro años, tratando de generar consensos y acuerdos en el marco legislativo que permitan tener leyes que beneficien al conjunto de los santafesinos, seguir recorriendo la provincia tomando contacto con las instituciones, con los compañeros, y tratando de aportar a un justicialismo que vuelva a recorrer el camino del triunfo.