Desde Santa Fe

Media provincia inundada por las crecidas del Paraná y el Salado y lluvias que acumularon 600 mm. en lo que va de abril, poblaciones aisladas en los departamentos del norte, 2.000 evacuados y un número similar de autoevacuados, rutas intransitables, caminos rurales destrozados y pérdidas millonarias en el campo, sintetizaron el panorama que ayer analizó el Comité de Emergencia Hídrica. El ministro de Gobierno, Pablo Farías, adelantó que el gobernador Miguel Lifschitz le pedirá a Mauricio Macri unos 30 millones de pesos para asistir a municipios y comunas y que extienda la emergencia agropecuaria a todo el territorio santafesino. El pedido de fondos no parece mucho porque ayer el intendente José Corral dijo que Macri lo había llamado por teléfono y le prometió 10 millones para el municipio de Santa Fe.

"La situación es grave", dijo Farías. Y explicó que la crisis combinó tres factores: las lluvias extraordinarias en el centro oeste, sus "efectos" en el aumento del caudal del Salado y la altura del Paraná, que opera como un tapón y frena el escurrimiento de sus afluentes. "Hay más de media provincia afectada", afirmó.

En orden de urgencias, el ministro mencionó las poblaciones aisladas en el norte de la provincia a la que sólo se puede llegar por aire, entre ellas Intiyaco, Cañada Ombú y Los Amores, en el Chaco santafesino, y los destrozos en los caminos rurales. La ruta provincial 6 "está cortada por el desborde del Salado", la ruta 1 también estuvo cortada en cercanías de Colonia Teresa, departamento San Javier, pero "ya se habilitó el tránsito" y la ruta 4 "tuvo algunos problemas, pero ya se puede pasar".

Se sigue monitoreando la autopista Rosario-Santa Fe a la altura del arroyo Colastiné, donde ya hubo cortes en otras crecidas del Salado. Y en el resto de la provincia, las situaciones tienen que ver con los caminos naturales y los accesos a los pueblos.

El ministro dijo que la "situación social está contenida". "Tenemos cerca de 2.000 evacuados en la provincia y un número similar de autoevacuados, seguimos con la distribución de alimentos" en los refugios.

En esa línea, informó que la provincia ya había transferido "alrededor de 6 millones de pesos del Fondo de Obras Menores" a los municipios y prometió "nuevos aportes". "Además, entregamos alimentos a través del Ministerio de Desarrollo Social y de la Secretaría de Protección Civil" y "recursos a todas las localidades afectadas para el alquiler de bombas, grupos electrógenos y movimientos de maquinarias, según las contingencias que deben enfrentar".

Farías dijo que Lifschitz llamará a Macri para pedirle 30 millones de pesos para atender "las demandas de localidades afectadas", que extienda la emergencia agropecuaria a toda la provincia y helicópteros y vehículos del Ejército para llegar a las poblaciones aisladas por el agua. "Si bien la Nación nos envió alimentos secos y otras cosas para paliar la situación, estamos tramitando fondos importantes para atender el impacto que va a tener la emergencia en las arcas de la provincia y los municipios y comunas", aclaró.

El pedido de los 30 millones no parece mucho porque poco después Corral anunció que había hablado con Macri y éste le prometió 10 millones. "Me preguntó sobre la situación de Santa Fe y me dijo que nos envió un aporte nacional de 10 millones, que si bien es mucho menos de lo que llevamos gastado en estos meses, es una ayuda importante", sacó pecho.

Después del pleno del Comité de Emergencia Hídrica de la provincia, se realizó la reunión del Comité de Gestión de Riegos de la ciudad de Santa Fe, convocada por Corral. Y si el intendente esperaba que concurriera el ministro de Gobierno, algo pasó porque éste mandó al secretario de Protección Civil, Marcos Escajadillo.