Un joven de 18 años fue asesinado ayer de dos balazos en el tórax por otro de 20, en la manzana 2 de Alto Verde, a metros de la escuela Simón de Iriondo que enseña a sus alumnos ﷓desde los 6 años﷓ a protegerse de los tiroteos que azotan al barrio. El homicidio ocurrió en plena siesta santafesina, alrededor de las tres de la tarde y se convirtió en el número 19 en lo que va del mes ﷓un récord absoluto﷓ y en el número 70 en lo que va del año. La víctima fue auxiliada, pero murió antes de llegar al hospital de emergencias José María Cullen, mientras que la Policía desplegó un impresionante operativo en búsqueda del asesino que estaba prófugo.

La decisión de los maestros de la escuela de Alto Verde de enseñarle a sus alumnos desde el primer grado a defender su vida ante las balaceras en el barrio tuvo esta semana repercusión nacional. "Cuando hay tiroteos, no salimos de la casa. Nos metemos debajo de la cama. Vamos gateando, llamamos a los hermanos y esperamos que un mayor nos diga que terminó y que no hay peligro", son las recomendaciones que se exhiben en carteles en todas las aulas del establecimiento.

El manual de supervivencia de los chicos de Alto Verde generó reacciones dispares. La directora de la Regional IV del Ministerio de Educación, Liliana Fassanelli, admitió un aumento de los "casos de inseguridad" en las escuelas capitalinas y dijo que la Brigada de Seguridad Escolar creada este año para atender la problemática era insuficiente. "No tenemos policías para todas las escuelas", dijo.

Pero el más crítico fue el propio jefe de la Unidad Regional I de Policía, comisario Juan Faustino Ruiz. "Los docentes de Alto Verde no están obligados a poner esos carteles en la escuela. En cuestiones de seguridad tiene que hablar gente que se encargue de la seguridad. A mí, el papel de docente no me quedaría muy bien. Creo que los docentes tienen que hablar de docencia", se molestó Ruiz.

Pero, el retruque de la realidad no tardó en llegar. Ayer, un muchacho de 18 años fue asesinado por otro 20 de dos tiros en el pecho, a plena luz del día, y en la misma manzana de la escuela de Alto Verde. "El hecho se produjo en la vía pública y los que protagonizaron el incidente, tanto el fallecido como el prófugo, se conocían por ser vecinos del barrio y ya habían tenido algunos enfrentamientos violentos", informó el comisario Ruiz. Por lo tanto, el asesino "perfectamente identificado", agregó.

Ruiz asumió el cargo hace apenas un mes con el mandato del gobernador Jorge Obeid de devolver a Santa Fe "la paz social". Esa fue la orden. Pero con el homicidio de ayer, la ola de crímenes ya provocó 70 muertos en lo que va del año. Una cifra récord.

Mientras tanto, siguen los saqueos a las escuelas santafesinas. Durante el fin de semana, un grupo de desconocidos robó una puerta y 16 ventanas de la planta alta de la escuela 262 República Argentina ﷓en Casanello al 2300﷓, por lo que seis cursos no podrán dictar clases hasta que se repongan las aberturas en las aulas.

Pero hay más. La escuela Nº 1000 Marcos Sastre, ubicada en Beruti al 5700, sufrió tres robos durante las vacaciones de invierno. Rompieron baños y se llevaron aberturas. "Hasta nos robaron la campana", dijo la vicedirectora del establecimiento, Susana González.

La vicedirectora de la escuela Argentina, Silvia Frantoni, contó por LT 10 que el lunes, en la vuelta a las aulas después de las vacaciones de invierno, descubrieron que se habían robado 16 ventanas de aluminio natural y una puerta en la planta alta. "Ante esta situación, hay seis cursos que no podrán dar clases", dijo la docente. Así que los chicos irán a la escuela por turnos. "Vamos a rotar entre los grupos del polimodal porque estamos en la mitad del trimestre y no queremos afectar a todos los niños. Cada día serán tres divisiones a la mañana y tres a la tarde que no tendrán clases", explicó. "Todas las puertas y las ventanas dan a un patio interno, pero tenemos un club al lado y es probable que por allí hayan entrado", concluyó Frantoni.