La realidad canaya cambió radicalmente en pocas semanas. Desde la llegada de Reinaldo Mostaza Merlo al banco centralista, el equipo fue otro. Central consiguió siete puntos sobre nueve en juego, gracias al cambio de actitud de los jugadores para enfrentar al rival de turno y a la confianza que tomaron algunos de los pilares auriazules, como Milton Caraglio, Jorge Broun y Leonardo Borzani.

Si bien en el primer tiempo contra Vélez, Central se pareció al conjunto que dirigía Gustavo Alfaro por la carencia de ideas, por darle demasiadas libertades a los jugadores contrarios y por no mostrar seguridad en su línea defensiva, en la segunda parte, Mostaza aplicó su prédica y metió mano en el equipo con el ingreso del Equi González, que aportó fútbol en el mediocampo y confirmó que su presencia en la cancha es de vital importancia para Central, que pelea por mantener la categoría.

"Desde que yo llegué, jugué con San Lorenzo, a los cinco días enfrentamos a Arsenal y después vino Vélez que es un equipo que juega muy bien y sacamos siete puntos sobre nueve en el minitorneo que jugamos. Realmente el balance es positivo porque encima tuvimos una semana complicada por las lesiones de algunos jugadores", analizó Merlo.

El cambio de mentalidad auriazul es apreciado tanto por los propios jugadores y los hinchas centralistas, sino también por los planteles contrarios. El técnico de Vélez, Ricardo Gareca aportó su visión. "Mostaza le cambió la cara al equipo. Ahora Central es un rival importante", dijo.

Luego del parate del campeonato, Central visitará el domingo 5 de abril, a las 19.30, a San Martín de Tucumán, por la octava fecha del Clausura. "En estas dos semanas vamos a esperar que se recuperen los jugadores que están lesionados o con alguna molestia para llegar bien al próximo partido sabiendo que cada domingo es distinto al siguiente", afirmó, dijo Mostaza.