0 San Martín (T): Gutiérrez, Serrano, Monge, Villavicencio, Anchén, Pérez Castro, Cantero, Saavedra, Herrera, Ibáñez y Canío. DT: Carlos Roldán.

1 Rosario Central: Broun, Danelón, Braghieri, Ribonetto, Burdisso, Lima; Moreno y Fabianesi, Borzani, Escobar; Zelaya y Caraglio. DT: Reinaldo Merlo.

Goles: ST 22 m Anchén (SM) en contra de su propia valla.

Cambios: ST 11m Valentín por Danelón y González por Zelaya (RC), 19m Turdó por Herrera (SM), 20m Antonio Ibáñez por Monge (SM), 43m Quinteros por Anchén (SM) y 44m Vizcarra por Caraglio (RC).

Arbitro: Héctor Baldassi.

Cancha: San Martín de Tucumán.

A veces el fútbol premia al equipo que menos arriesga. Y eso fue lo que pasó ayer en Tucumán. El equipo de Mostaza Merlo salió a buscar el empate de visitante y se llevó un premio demasiado grande para lo que había propuesto en la cancha. Jugando con cinco defensores, cerrándose bien atrás, marcando y apostando a algún contraataque, Central pudo conseguir una victoria importantísima en la lucha por mantener la categoría. Con un gol en contra, convertido por el defensor uruguayo Anchén, los canayas se alzaron con un triunfo que si bien no merecieron, una vez arriba en el marcador cuidaron como oro y luego del pitazo de Baldassi festejaron con la parcialidad centralista que los acompañó.

El partido se jugó como una verdadera batalla. Dientes apretados en ambos conjuntos y un poco más de fútbol por el lado de los locales. Central apostó a un esquema ultradefensivo. Ribonetto jugando libre atrás, Burdisso y Braghieri en el centro, un poco más adelante, y Lima y Danelón por los costados. Mientras que los tucumanos, sin muchas ideas, tuvieron las chances más claras y merecieron mejor suerte.

En el primer tiempo el equipo de Merlo apeló a refugiarse en su área y apostar a algún contraataque pero en el mediocampo ni Borzani ni Escobar podían manejar el balón y habilitar a los delanteros que estaban perdidos en el área rival. Sólo Caraglio intentaba aguantar la pelota pero no era acompañado por ningún volante que subiera por los laterales. Central propuso un juego friccionado, apoyado en la marca en todo el terreno. Con ese esquema el conjunto de Mostaza cuidaba su arco y no pensaba en el área rival. Es así que Central no inquietó en ningún momento al arquero Gutiérrez.

Si bien San Martín tampoco proponía mucho fue el único equipo que buscó el arco rival. La primera llegada la tuvo el chileno Canío quién cabeceó desviado luego de un centro de Cantero. Los locales tenían el balón pero no eran claros y le resultaba muy difícil entrarle a la defensa canaya que se mostraba segura. Mientras tanto, los canayas no hilvanaban ninguna jugada colectiva y los volantes mostraban como única idea los pelotazos para que Caraglio y Zelaya se las arreglaran arriba.

En la segunda parte el trámite no cambió para nada. San Martín siguió yendo adelante y Central aguantando atrás y buscando el gol con alguna pelota parada. Al minuto un cabezazo de Anchén en palomita pudo ser la apertura del marcador, pero Broun con gran esfuerzo contuvo la pelota en su palo derecho. Después llegó la primera ocasión canaya con un cabezazo de Caraglio que salió arriba del travesaño. Viendo que San Martín seguía atacando, Merlo lo puso al Equi González (en lugar de Zelaya) para manejar el balón y ese cambio le dio mas aire al conjunto visitante. Por su parte, los tucumanos inquietaban con tiros desde afuera del área y a los doce minutos un remate de Canío fue contenido por Broun.

En esos minutos Central había emparejado el partido aunque lejos estaba de preocupar al arquero Gutiérrez pero la suerte apareció y benefició al equipo de Merlo que durante todo el encuentro apeló a los famosos cuernitos. A los 22 minutos, en un centro intrascendente de Moreno y Fabianesi, el defensor uruguayo Anchén intentó rechazar y en un movimiento poco ortodoxo metió la pelota por arriba de Gutiérrez poniendo el uno a cero para Central. A esa altura era un premio inmerecido por lo mostrado.

Si con el empate Central no salía de su área, menos lo hizo cuando se puso en ventaja. Los once canayas se abroquelaron atrás, abortaron todos los intentos tucumanos y aunque no propusieron mucho, se llevaron tres puntos clave en el minitorneo por seguir en primera.