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1 Almirante Brown: Monasterio; Centurión, Nievas, Schunke, León; Verón, Olmedo, Deláguila; Rodrigo Díaz; Mandarino, Bazán Vera. DT: Blas Armando Giunta.

0 Central: Broun, Guizasola, Valentini, Peppino, Braghieri; Zarif, Paglialunga, Moya; Cristian González; Medina, Figueroa. DT: Reinaldo Carlos Merlo.

Gol: ST: 8m Rodrigo Díaz (AB).

Cambios: ST: 21m Huerta por Rodrigo Díaz (AB), 25m Rivero por Guizasola (C), 30m Gómez por Moya (C), 37m José Luis García por Verón (AB), 39m De León por Cristian González (C) y 40m Maraschi por Mandarino (AB).

Arbitro: Rafael Furchi

Cancha: Almirante Brown.

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Central dejó de ser el equipo vulnerable que se mostró en las primeras cuatro fechas. El triunfo ante Atlético de Rafaela fue producto de una evidente evolución en el juego que inculca Reinaldo Merlo. Esa recuperación se volvió a ver ayer en Isidro Casanova, donde el canaya fue superior en el rendimiento a su rival. Pero el resultado recordó lo sucedió en el arranque de torneo. Es que Central perdió, esta vez por un fallo defensivo que permitió la ventaja para el local, pero por sobre todo por falta de definición para llegar al gol en la decena de situaciones que generó.

La buena impresión que dejó Central en algunos pasajes del partido con Atlético de Rafaela quedó ratificada anoche, donde en Isidro Casanova, donde mostró el equipo aptitudes para sostenerse en el juego como el dominador de las acciones. Con Antonio Medina como pieza de desequilibrio, y progresando con pelota al piso, el auriazul se aproximó al gol, instancia que no concretó por rematar siempre desviado, a excepción de un cabezazo de Paglialunga al travesaño.

Los locales no podían disimular la carencia de talentos. Les alcanzó con la fuerza de Bazán Vera y algunos intentos individuales para darle trabajo a Broun, quien en dos oportunidades debió intervenir ante disparos del delantero local que tenían buena dirección.

Central impuso marca en el medio, fue resoluto en defensa para desarticular todo avance de Almirante Brown y encontró sorpresa en las corridas por izquierda de Moya. Lo que faltó fue resolver con mayor puntería las ocasiones de gol, algunas de las cuales nacieron con la propuesta de juego a un toque que liderada el Kily González, al jugar en posición de enlace.

No perdió intensidad el partido en el segundo tiempo. Pero como Almirante Brown salió a jugar con más decisión al momento de atacar, Central no tuvo la comodidad de la primera parte, y la adversidad que asomaba en el juego se trasladó al marcador, cuando Rodrigo Díaz definió bajo y cruzado al encontrarse la pelota en el área menor tras rebote corto de Valentini.

De inmediato el canaya reaccionó volcando el equipo en área rival. Los canayas tuvieron poder de respuesta, algo que no se les veía en anteriores partidos. Lo que volvió a faltar es certeza en la definición. Figueroa lo tuvo con dos cabezazos, uno que se fue apenas desviado y el otro llegó a las manos de Monasterio. La presión se sostuvo y los locales se vieron claramente desbordados. Aunque el gol de auriazul siguió sin aparecer.

El partido terminó con Central desesperado y Almirante Brown aguantando las embestidas. La victoria de local fue irreversible. Pero el equipo de Merlo se volvió de Isidro Casanova produciendo una imagen deportiva que no tiene analogías con las primera fechas, aunque otra vez dejó pasar puntos necesarios para colarse entre los primeros.