En el debut de Javier Torrente, Banfield le asestó ayer otro golpe a Ñuls. En un discreto partido disputado en el Coloso Marcelo Bielsa, que abrió la 11 fecha del Torneo Clausura, la visita se llevó los tres puntos aprovechándose del mal momento futbolístico de la Lepra, que acumuló su tercera derrota consecutiva en el torneo, estiró a nueve la racha sin triunfos, y continúa en el último lugar de la tabla con cinco puntos. El ex rojinegro Jorge Achucarro, a los 13 minutos de la segunda etapa, definió correctamente de cabeza ante la pasividad de la defensa de Ñuls para marcar el único tanto del encuentro. Cuando el árbitro Alejandro Toia, de regular desempeño, marcó el final del partido, Torrente aplaudió un par de veces, saludó a un par de jugadores, y se retiró de la cancha solo rumbo al vestuario, escuchando los primeros silbidos de reprobación desde las tribunas, pensando seguramente en la difícil tarea que tiene por delante. Más tarde, y en el playón del estacionamiento, un grupo de hinchas arrojó proyectiles e insultó a los jugadores cuando se retiraban del estadio.

A pesar de lo que se había hablado durante su primera semana al frente del primer equipo, en relación al sistema táctico que iba a utilizar en su soñado debut, lo cierto es que en los primeros minutos del encuentro Torrente paró a Ñuls con dos líneas de cuatro bien definidas, mientras Sperdutti y el paraguayo Camacho se turnaban para acompañar al solitario Bieler.

No habían pasado un par de minutos, cuando Peratta con una atajada a puro reflejo salvó la caída de su arco ante un cabezazo de Ferreyra a metros del arco. La jugada se convirtió en la única llegada clara de la visita en todo el primer tiempo. Después, el conjunto dirigido por Sebastián Méndez se limitó a achicar los espacios y cada vez que pudo intentó avanzar en el terreno gracias a la movilidad del ex Central, Jonathan Gómez, y a los centros del zurdo De Souza.

Tuvieron que pasar 30 minutos para contabilizar dos jugadas de peligro en el área de Bologna. La primera, un cabezazo de Schiavi a la salida de un córner que salió desviado. La otra, una corrida de Camacho por izquierda habilitando a Sperdutti, que el delantero de alcanzó a puntear de derecha apremiado por los defensores, pero la pelota fue directamente a las manos del arquero de Banfield.

Nada cambió en el comienzo del segundo tiempo. El partido continuó siendo chato, con jugadores tratando de sacarse la pelota de encima esperando que el rival se equivocara. A los 12 minutos, y luego que el arquero Bologna controlara fácilmente un centro de Sperdutti, el lateral derecho Toledo se llevó la pelota por su sector sin que nadie lo marcara y abrió para Quinteros. El otro ex Central en cancha envió un centro pasado que Achucarro, entrando con total libertad, cabeceó esquinado dejando sin chances a Peratta.

Si Banfield estaba cómodo con el empate, la ventaja le otorgó el plus de tranquilidad necesaria. Quedaban 30 minutos para torcer la historia. Torrente decidió la salida del capitán Bernardi y mandó al terreno a Lorenzo Faravelli, un juvenil enganche de 17 años. Diez minutos más tarde, y frente a la indisimulable anemia ofensiva, intentó con Almirón por Camacho. Con Sperdutti instalado unos metros más arriba, Ñuls tenía así tres puntas para inquietar a Bologna. También probó con Velázquez, pero la lepra nunca encontró el camino.

0 Ñuls: Peratta; Vella, Schiavi, Lema, Cichero; Dolci, Mateo, Bernardi, Camacho; Sperdutti y Bieler. DT: Javier Torrente.

1 Banfield: Bologna; Toledo, Delfino, Bustamente, Tagliafico; Quinteros, Bustos, De Souza, Gómez; Achucarro y Ferreyra. DT: Sebastián Méndez.

Gol: ST: 12' Achucarro (B)

Cambios: ST: 17' Faravelli por Bernardi (Ñ); 27' Almirón por Camacho (Ñ); 32' Velázquez por Dolci (Ñ); 33' Rosada por Gómez (B); 39' Méndez por Achucarro; 43' Romero por Ferreyra (B)

Arbitro: Alejandro Toia

Cancha: Coloso Marcelo Bielsa.