Al menos en la aceptación popular, a la mayoría de la hinchada de Central se la podía reconocer por su empatía con el peronismo y en la fuerza policial la gran mayoría también volcaba su simpatizaba por los colores auriazules. Pero dicha teoría puede ponerse en duda, al menos en el caso de la institución policial, que ante la proximidad del encuentro entre Tiro Federal y Central elevó a la Asociación del Fútbol Argentino (AFA) un polémico informe, donde denomina el compromiso como "Clásico Rosarino", puntualiza sobre la "mala actuación futbolística que viene desempeñando el primer equipo de Central" y pronostica que "se encuentra alejado de la posibilidad de ascenso en el presente torneo a la `Primera A'". Estos argumentos arguyó la policía para pedir que el juego se dispute el martes 24 de mayo a las 15.30, en barrio Ludueña, y sin público. La otra exageración es analizar "el posible traslado a otro estadio de esta ciudad".

La fuerza policial de la ciudad supo estar tan identificada con los colores de Central como la esquina de Cafferata y Urquiza. Quizá por eso genere más extrañeza el tono de la misiva elevada a la AFA el 25 de abril, un mes antes de que tigres y canayas deban enfrentarse en Ludueña.

La carta, dirigida al presidente de la AFA Julio Grondona, está firmada por el nuevo titular de la División Operaciones de la URII, comisario mayor Sergio Erard. En la ocasión, la autoridad policial requiere que "el cotejo futbolístico denominado `Clásico Rosarino' entre los equipos de Tiro Federal y su similar de Rosario Central comience y finalice con la luz del día", proponiendo como fecha el martes 24 a las 15.30.

Para tal pedido la policía ofrece una serie de "circunstancias": "La amistad existente entre los simpatizantes de Tiro Federal y Ñuls, los cuales tiene una manifiesta rivalidad con Central". El supuesto encono entre tigres y canayas no tiene antecedentes, como así tampoco la presunta simpatía entre leprosos y tigres.

Además, Erard recalca "la campaña publicitaria que se está llevando a cabo por parte de la Comisión Directiva de Tiro Federal, donde hace mención de la facilidad para adquirir entradas para el cotejo mencionado, con la sola mención de no ser simpatizantes de Central, o en su defecto de Ñuls".

La inquietud por la seguridad en barrio Ludueña llevó al comisario mayor a resaltar la coyuntura deportiva de los canayas, a quienes no les pronostica un futuro feliz. "La mala actuación futbolística que viene desempeñando el primer equipo de Central, que ha derivado en cambios de director técnico (por la salida de Héctor Rivoira y la asunción de Omar Palma), encuentra alejado de la posibilidad de ascenso en el presente torneo a la `Primera A', como es la pretensión de la `Parcialidad Centralista'".

"Cabe aclarar que la Superioridad policial se encuentra evaluando la posibilidad de que dicho encuentro se dispute a puertas cerradas, como así también el posible traslado a otro estadio de ésta ciudad", remata Erard.