DEPORTES › CENTRAL EVITó LO QUE PARECíA IBA A SER UNA DERROTA ABULTADA.
Nunca pudo con Instituto pero le hizo partido en un enfrentamiento emocionante donde hubo muchos goles y también expulsados. De todas maneras, el canaya jugó desordenado y no pudo superar las imprecisiones que tuvo ante Boca Unidos.
3 Instituto: Carranza; Damiani, Erpen, Barsottini, Canever; Zapata,
Lima, Ribolzi, Casado; Bergesse, Klimowicz. DT: Claudio Vivas.
3 Central: Bava; Zarif, Valentini, Godoy, Delgado; Méndez, Vismara, Ballini, Carrizo; Medina, Coniglio. DT: Omar Palma.
Goles: PT: 3m Damiani (I), 7m Ballini (C), 16m Coniglio (C), 22m Barsottini (I) y 37m Ribolzi (I). ST: 26m Medina (C).
Cambios: ST: 4m Furios por Damiani (I), 14m Torresi por Casado (I), 20m Ramiro Costa por Méndez (C), 31m Abila por Klimowicz (I) y 42m Guizasola por Carrizo (C).
Arbitro: Diego Abal.
Cancha: Instituto
Expulsados: ST: 11m Ballini (C), 30m Coniglio (C) y Erpen (I).
Central e Instituto protagonizaron un partido emocionante, donde hubo seis goles y tres expulsados. El canaya terminó jugando con nueve hombres y evadió la derrota, que parecía consumada una vez que el local logró revertir el triunfo parcial de los canayas. Se jugó poco por abajo y mucho por arriba, tanto que los goles llegaron de cabeza, y ningún goleador se repitió en el grito. Con el empate el auriazul logró salvar su imagen deportiva, aunque no le sumó argumentos para sostener el sueño de la promoción, de la que quedó a cinco puntos.
Al ingresar la temporada en zona de definición, solo la victoria importaba en Córdoba para mantener los objetivos intactos. Llegar a la promoción es lo que persiguen Central e Instituto. Esa urgencia por sumar unidades llevó a ambos a jugar con menos atención defensiva y más vocación por el ataque. Y entre aciertos y errores, el primer tiempo entregó cinco goles, con un desarrollo de emociones cambiantes, donde cada uno, a su turno, estuvo en ganador.
El primer descuido fue de Méndez, quien dejó suelto a Damiani a la ejecución de un tiro de esquina y de palomita, sobre el área chica, el ex Ñuls marcó la primera diferencia.
Mucho antes de que Central ingrese en crisis, una gambeta y centro de Medina encontró a Ballini por el segundo palo señalando el empate con cabezazo bajo, a los pocos minutos del tanto local.
El partido era intenso por la predisposición a llegar rápido al área rival. Los centros iban de un área a otra. Lázzaro ganó por arriba y anotó el segundo, pero fue anulado por posición adelantada. Mientras todo el estadio celebraba el gol que no valió, Zarif lanzó un pelotazo frontal a Coniglio, quien al saltar le ganó a su marcador y superó a Carranza con cabezazo por sobre el cuerpo del uno.
Contrariados, los hinchas de la gloria no comprendían cómo de un tanto a favor para volver a sacar diferencia se pasó a la derrota. Aunque antes de que el murmullo se disipara, el estadio volvió a explotar a grito de gol, en esta oportunidad con cabezazo de Barsottini pisando el área menor tras centro de corner.
Pelota que llegaba al área canaya caía en la cabeza de un jugador visitante. La tendencia nunca se apagó. Por el contrario, Ribolzi, desde 20 metros, le ganó a Zarif y conectó un espectacular cabezazo largo y bombeado al segundo palo, que encontró a Bava volando sin poder tocar el balón. El volante volvió a poner a Instituto en ventaja, y así se fue el auriazul al descanso.
Las sucesión de goles no le dio tiempo a Central para tratar de encontrar una mejor posición en la cancha. El canaya jugó desordenado, como ante Boca Unidos, y al no aparecer respuestas ante el dominio local, Ballini y Méndez descargaron la tensión con patadas bruscas: el juvenil vio la roja, mientras que el ex Boca apenas la amonestación. Y para no sufrir otra expulsión Palma reemplazó a Méndez en la jugada siguiente por Ramiro Costa.
Desde entonces Central volvió a pensar en jugar al fútbol y en un centro de Carrizo llegó el sorpresivo empate de Medina, con cabezazo frontal. Instituto sufrió el golpe emocional del gol y Central se animó a ir por más. Pero Coniglio se agredió con Erpen y ambos vieron la roja. Instituto terminó jugando con diez, Central con nueve.
Como el empate no tenía valor para ninguno, el final del partido encontró a los equipos corriendo en desesperación por la victoria. Instituto presionó, Central contragolpeó. Nadie más volvió a ganar de cabeza y la igualdad atentó a ambos en sus objetivos por llegar al cuarto puesto. El resultado no alteró la ubicaciones de los equipos en la tabla, aunque el partido que animaron fue el mejor de la temporada.
(Versión para móviles / versión de escritorio)
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina
Versión para móviles / versión de escritorio | RSS
Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux