Ñuls y Central volverán animar el clásico de la ciudad en enero próximo, a más de dos años del último partido. La confirmación llegó por parte de la empresa organizadora, que anunció los dos últimos domingos de enero como fecha señalada para los amistosos. El primer encuentro se disputará en el Gigante de Arroyito y el segundo en el Coloso del Parque. Los clubes se comprometieron en el contrato a poner mayoría de titulares. Queda por definir entre municipio y policía si se autorizará la asistencia de público visitante. Ambos compromisos se emitirán en directo por un canal de cable. "Nosotros también tenemos una gran expectativa por ver el clásico de Rosario", valoró Rodrigo Bauso, de la firma organizadora World Eleven.

Ñuls quería jugar el 19 y 16 de enero, y Central el 18 y el 25. Hasta que apareció la televisión e impuso sus intereses: los clásicos se jugarán el 20 y 27 de enero, posiblemente a las 20, con emisión en directo por la pantalla de Fox Sports, que adquirió los derechos.

Por contrato, los entrenadores tendrán la obligación de jugar ambos compromiso con mayoría de jugadores titulares. Aunque Central disputará la revancha en el Coloso del Parque cinco días antes de su reinicio de la actividad oficial en el Nacional B, que encontrará al conjunto de Miguel Russo visitando a Deportivo Merlo en 2 de febrero por la 19ª fecha. En tanto, Ñuls tiene previsto regresar de Mar del Plata, donde realizará la pretemporada, dos días antes del clásico del 20, que se jugará en el Gigante de Arroyito.

Lo que aún no se definió es si se permitirá el ingreso de público visitante. Los canayas prefieren clásicos solo con público local, mientras que los leprosos exigen asistencia de hinchas visitantes. Pero la decisión está en manos de la policía, que es la debe asumir la responsabilidad de la seguridad en ambos encuentros. Además los organizadores consultarán al municipio la factibilidad de realizar los partidos en horario nocturno --la televisión no acepta jugarlo por la tarde-- con acceso para ambas parcialidades. Lo que está acordado es que de aprobarse la asistencia de visitantes, canayas y leprosos dispondrán de nueve mil generales cuando visiten el estadio de su clásico rival.

La designación de los árbitros, en cambio, está en manos de la AFA, que aún se resiste a elegir jueces de la ciudad --Sergio Pezotta, Saúl Laverni y Pablo Díaz-- para controlar el partido.