La cuarta derrota del torneo sufrida en la 6ª fecha del Inicial pone a Miguel Russo en el centro de la críticas en Arroyito, con algunos dirigentes que abogan por un respaldo incondicional y otros que proponen retomar el debate sobre el futuro del equipo el próximo domingo, luego del partido que Central juegue ante Tigre en Victoria. Pero como denominar común en Central se espera para el fin de semana un cambio en el juego y la formación del equipo, con expectativas puestas en jugadores de mayor potencial en el rendimiento, tales los casos de Guillermo Pol Fernández, Gonzalo Castillejos y Pablo Becker; y en algunos que recuperan su lugar, como el goleador Carlos Luna.

En los últimos tres partidos se vio lo peor de Central: triunfo ante Godoy Cruz, dejando pocas señales positivas, y derrotas consecutivas ante Colón y San Lorenzo, donde el conjunto poco pudo hacer para dejar pasar los puntos en disputa. Antes perdía solo de visitante, ahora lo hace también de local, multiplicando la desconfianza.

En Arroyito se respira desde el primer día de su llegada como técnico de Central la poca empatía que el presidente Norberto Speciale tiene por Russo. Para ganarse su confianza, el titular de Arroyito le concedió el entrenador el pedido por asumir el mando de las divisiones inferiores, improvisando un extraño vínculo de asociación deportiva con Tiro Federal que está bajo su tutela.

Pero la permanencia del técnico en el club está sujeta a los resultados, más ahora que el equipo cayó en zona de descenso con la derrota del domingo. Es por eso que el partido del domingo ante Tigre --perdió los últimos tres encuentros y hoy podría ser despedido Diego Cagna como entrenador-- marcará el futuro próximo del equipo. Y es por eso que el plantel será acompañado en Victoria por la presencia de las principales autoridades de la Comisión Directiva.

De equipo se espera que vuelva al triunfo. Pero por sobre todo que muestre capacidad de reacción y que Russo resigne su obstinado respaldo a jugadores de objetable jerarquía para la categoría, como Hernán Encina o Federico Carrizo, más aún con las presentaciones que tuvo Pol Fernández y la vuelta del juvenil Becker, ya recuperado de una serie de lesiones consecutivas que lo excluyeron del primer equipo el último semestre.

Desde esta mañana en Arroyo Seco, Russo analizará la propuesta para jugar en Victoria. Es improbable que se mantenga de titular Matías Ballini. Pero como el técnico no es adepto a cambios numerosos, evaluará la salida de Encina o Carrizo, no se arriesgará con la vuelta de Diego Lagos, y con seguridad en ataque dispondrá de Carlos Luna, ya recuperado de una lesión muscular, en lugar de Abreu. Y en el arco retornará Mauricio Caranta tras una suspensión. Pero la presencia de Gonzalo Castillejos en el banco también se la hace difícil de sostener al entrenador.

Russo tendrá cinco días para recomponer el equipo. Desde esta mañana el plantel retoma los entrenamientos en Arroyo Seco para definir la alineación que necesariamente visitará a Tigre el domingo a las 16 con novedades en su formación.