La intensa lluvia de ayer obligó a Miguel Russo a posponer para hoy la alineación de Central que pasado mañana debutará en el torneo final ante Quilmes. La aparición inesperada será la de Elías Gómez en defensa, mientras que, a pesar de la preferencia del técnico por Sebastián Abreu, el nueve ante el cervecero será Gonzalo Castillejos.

El mal tiempo obligó al entrenador canaya a practicar ayer en un estadio cubierto de fútbol 5 en Arroyo Seco, aplazando para hoy la decisión de la alineación que el domingo a las 17 visitará a Quilmes. Russo se encontrará hoy ante la situación de elegir entre Delgado o Gómez en defensa, mientras que en ataque deberá ratificar a Castillejos, titular toda la pretemporada, pero que no termina de convencer por sus características al entrenador.

En defensa, Delgado tiene el alta médica pero Russo probablemente optará por apostar por el juvenil Gómez, quien cumplió toda la preparación de verano junto a sus compañeros, y no así Delgado, aquejado por repetidas lesiones musculares.

En ataque el técnico tiene ganas de parar a Abreu, pero su condición física no es óptima para jugar desde el primer minuto, lo que aumenta las opciones por Castillejos, decididamente el delantero del plantel que menos convence a Russo. Así, el canaya visitará al equipo de Blas Giunta con Caranta; Ferrari, Donatti, Magallán, Gómez; Encina, Domínguez, Méndez, Carrizo; Luna, Castillejos.

En cuanto al estreno de los canayas en condición del local, el domingo 16 ante River, el tesorero Eduardo Macías confirmó ayer que los hinchas deberán pagar un bono obligatorio para ingresar el estadio, además de presentar cuota al día y en su caso el abono a platea, en una decisión "antipática, que no se quería tomar, pero que responde a la necesidad de mantener a todas las figuras del equipo". "Hace tres años que Central no vende un jugador, eso nos obliga a buscar otros recursos para afrontar los gastos. Nosotros no podemos hacer un torneo de menos de 20 puntos porque volvemos a la B. Decidimos mantener el plantel y eso tiene un costo", explicó Macías.

"Boca vino por Federico Carrizo y ofreció un millón y medio de dólares por el 60 por ciento del pase. Decidimos no vender para mantener el equipo, que necesita consolidarse en Primera", reconoció el tesorero auriazul a Radio Dos.