A pesar de que en el torneo Transición Central perdió los dos últimos partidos y ganó uno solo de los últimos seis, Eduardo Coudet no tendrá dificultades para definir el equipo que el domingo pisará el Coloso del Parque. El Chacho imagina una alineación similar a la que empezó el juego con San Lorenzo, con dos grandes interrogantes: la situación de Cristian Villagra, a quien se lo notó lejos de su nivel el domingo, y de Marcelo Larrondo, quien tiene el alta médica y desde hoy entrenará con el equipo principal.

Central comienza esta semana las prácticas con el objetivo en el clásico del domingo, pero también con la ansiedad acuestas de conocer el jueves su rival de octavos de final de Copa Libertadores, encuentro que el canaya jugará en condición de visitantes miércoles o jueves de la semana que viene.

Más allá del destino que le toque en el certamen internacional --le puede tocar un equipo mexicano, distancia que le quita un día de entrenamiento al plantel--, el canaya se jugará las ilusiones que le quedan vivas en el Transición ante Newell's, rival al que se acostumbró a vencer en los últimos tres campeonatos.

El equipo que irá al parque Independencia, y que desde hoy probará Coudet, es el que comenzó a jugar el domingo con San Lorenzo. Para eso se espera la recuperación de José Luis Fernández, quien pidió el cambio en el Nuevo Gasómetro por una molestia que se disipó a las pocas horas y por eso no se hizo estudios, como así también se evaluará la evolución de Villagra. El lateral no mostró buen ritmo el pasado fin de semana, se vio superado por Cerutti una y otra vez y por eso el Chacho prestará atención a su semana de trabajos. Porque con Javier Pinola suspendido no hay muchas opciones, más que el ingreso de Jonás Aguirre.

La situación de Larrondo aparece clara a pesar de las expectativas abiertas. En verdad, desde que Larrondo se lesionó el equipo perdió efectividad y ya no volvió a ganar seguido. En el arranque del año Larrondo anotó cinco goles en los primeros siete partidos, y el canaya extraña su protagonismo. El jugador tiene el alta médica para jugar y entrenar al ritmo de sus compañeros, tras la operación de meniscos a la que fue sometido.

Hoy en Arroyo Seco, Larrondo practicará bajo las mismas exigencias del resto. Pero lleva 40 días sin hacer fútbol en las prácticas y esto lo aleja de la titularidad por más dependencia que tenga el canaya de sus goles. El lugar de Larrondo en el clásico parece estar en el banco de suplentes y su protagónico podría aparecer en los últimos minutos del encuentro, para entonces reaparecer como titular en Copa Libertadores, días después.