"Vamos a maximizar los recaudos para que en el banderazo no tengamos problemas y el domingo se realizará un operativo especial por los hechos vividos en la interna de la barra de Newell's", anunció ayer el ministro de Seguridad de la provincia, Maximiliano Pullaro. El domingo en el Coloso se jugará el clásico de la ciudad por los cuartos de final de la Copa Santa Fe pero toda la atención está puesta en la violenta disputa que animan dos facciones de la barra leprosa por el poder. "Vamos hacer todo el esfuerzo para que el clásico sea una fiesta", recalcó Pullaro. El mensaje del ministro fue acompañado por los presidentes de los clubes, Eduardo Bermúdez en Newell's, Rául Broglia en Central, quienes se dieron un abrazo. "Venimos trabajando juntos para coseguir cosas en AFA", aseguró Broglia. Mañana en el Coloso se desplegarán 250 efectivos por el banderazo y 750 el domingo.

Pullaro, Bermúdez y Broglia se encontraron ayer en Gobernación para acordar la organización de los clásicos (el domingo en el Coloso, el 31 en el Gigante) por la Copa Santa Fe. El ministro de Seguridad celebró el ambiente de camaradería entre los clubes y se entusiasmó con ver clásicos sin incidentes. "Nos pusimos de acuerdo en cómo se van a llevar adelante los partidos, discutiendo algunas cuestiones para que el partido se viva con intensidad y sea una fiesta de la ciudad. La reunión fue excelente. Queremos dar un mensaje de unidad, de convivencia y esto se vio reflejado en el abrazo que se dieron las autoridades de las dos instituciones", repasó Pullaro al finalizar la reunión.

El abrazo entre Bermúdez y Broglia "no fue falso" para el titular canaya. "Hemos demostrado que estamos trabajando espalda con espalda para conseguir más cosas en la AFA, donde a veces no somos reconocidos. Trabajamos en conjunto para el fútbol rosarino", aseguró Broglia. En ese mismo recinto, en 2010, aún se recuerda el escándalo del ex presidente canaya Horacio Usandizaga al dar un portazo en una reunión con el ex presidente de Newell's, Guillermo Lorente, al debatir el reparto de entradas previo a un clásico.

Bermúdez también ayer puso el acento en las relaciones que institucionales entre Newell's y Central: "Estamos trabajando muy bien con Central, en AFA hay una anarquía, acá con el doctor (Broglia) estamos trabajando para defender al fútbol rosarino. Nos queremos ganar, pero entre las comisiones de cada club está todo muy bien".

Sin dudas que la madura relación que cultivan los clubes propicia el mejor clima para el clásico del domingo, aunque cada club presentará su respectivo equipo de reserva. "Se acordó entre los dos clubes jugar con equipos alternativos. La Copa Santa Fe nació con algunas debilidades y por eso tiene la necesidad de ir jerarquizándose con el tiempo. No es tanto problema que no se juegue con los equipos de primera. Pero esta Copa irá creciendo y seguramente el torneo va a ser un buen negocio a futuro".

Lo que preocupa es la disputa que animan los barras de Newell's para quedarse con el mando de la hinchada. Al respecto, Pullaro anunció que mañana, 250 efectivos tomarán el control del banderazo convocado por los hinchas leprosos en el Coloso y el domingo en el estadio la fuerza policial desplegará 750 uniformados. "Trabajamos para que en términos generales no tengamos problemas. El operativo se planifica en toda la ciudad", resaltó el ministro.