2 ARSENAL

Cuenca, Gandolfi, Loeschbor, Casteglione, Sekagya, Garnier, Ortiz, San Martín, Llama, Raymonda, Obolo, DT: Gustavo Alfaro

3 ÑULS

Villar, Spolli, Aguirre, Ré, Araujo, Husain, Zapata, Lucero, Arrieta, Cejas, Cardozo, DT: Pablo Marini.

Goles: PT: 5m Ré (Ñ) en contra, 19m Cardozo (Ñ), 23m Ortiz (A) y 37m Cejas (Ñ). ST: 23m Cardozo (Ñ)

Cambios: PT: 38m Orcellet por Raymonda (A). ST: 13m Pablo Pérez por Araujo (Ñ), 17m Peralta por Lucero (Ñ), 25m Gómez por Garnier y Mouche por Llama (A),

Arbitro: Federico Beligoy

Cancha: Arsenal

Expulsado: PT: Cuenca (A).

Con un Cardozo inspirado en la red y un Cejas lúcido con la pelota, Ñuls remontó en dos oportunidades un marcador adverso y se trajo ayer su tercer triunfo consecutivo bajo la dirección técnica de Pablo Marini. La emotiva victoria rojinegra se construyó bajo una buena dosis de convicción y con la dupla Cejas-Cardozo mostrando su mejor expresión. Arsenal había sacado ventaja con un tanto en contra de Germán Ré. Pero el equipo local nunca pudo imponer condiciones de juego y cedió los tres puntos ante un rival superior.

Fue Ñuls el que jugó con la pelota a sus pies y el que dominó las principales acciones del partido. Pero también fue el equipo que más dudas cargó a la hora de defender. Y este combinación de factores se conjuraron para armar un encuentro con emociones abundantes y goles. Es que Arsenal marcó en cada ataque y la lepra fue peligrosa en cada avance.

El marcador se abrió accidentalmente, cuando un tiro libre que cayó en el área leprosa rebotó involuntariamente en la pierna derecha de Ré --cerró para marcar a Casteglione-- y se le metió a Villar sobre su palo izquierdo. No había motivos para pensar en la posible ventaja para el local. Pero la imprevista adversidad no atentó en el ánimo y las convicciones de los rojinegros. Porque Ñuls profundizó su dominio y desde entonces fue más incisivo en cada ataque. Y en los pies de Cejas nació la igualdad: el delantero, tirado sobre la derecha, desbordó a voluntad por su carril, llegó hasta el fondo y tiró el centro atrás, donde estaba Cardozo para definir con un derechazo alto.

Pero no tuvo tiempo la lepra para celebrar el empate. Porque minutos después un tiro al arco de Ortiz desde fuera del área grande terminó dentro del arco de Villar a pesar de que el disparo no llevaba mayor riesgo. Lo que descolocó al uno leproso es que la pelota se desvió en Ré y terminó ingresando por el palo izquierdo.

Ni siquiera el segundo tanto local hizo flaquear a los dirigidos por Marini. Ñuls conservó su ambición ofensiva. Y tuvo el segundo en los pies de Arrieta, que al enfrentar a Cuenca la picó por sobre el travesaño. Y en el posterior avance profundo llegó la nueva paridad: Araujo tiró un centro pasado, apareció Lucero por detrás con un débil zurdazo que llegó a tapar el arquero. Pero el volante zurdo capturó el rebote del arquero, tocó atrás y definió Cejas con arco libre. Con el gol Cuenca reclamó con vehemencia una supuesta infracción de Lucero y el arquero vio la roja.

La ventaja de un hombre que dispuso la lepra para el segundo tiempo no se evidenció en el campo de juego. De igual modo los rojinegros sostuvieron el dominio del juego, aunque perdieron en profundidad. Y fue necesaria una dosis de fortuna para que el rojinegro se pusiera por primera vez en ventaja: fue cuando un centro de Cejas se desvió en Casteglione, la pelota cayó en los pies de Cardozo y el delantero resolvió con un zurdazo bajo sobre el primer palo.

El último cuarto de hora se jugó bajo una intensiva lluvia y con un Arsenal volcado en ataque. Ñuls lo pudo definir de contra, pero defeccionó en la definición. Y por eso la lepra debió sufrir hasta el último centro para celebrar el triunfo.