"No hay una facultad para aprender a vivir, pero esto es lo más parecido". Con estas palabras Fernando Peirone, director de la Facultad Libre de Rosario, describió este espacio que el 4 de mayo próximo abrirá sus puertas por cuarto año consecutivo. Cuenta con un promedio de 1500 alumnos y hasta el jueves continúa la inscripción para el primer cuatrimestre en el que ya se anotaron unas 400 personas de entre 18 y 70 años. Con la clara premisa de pensar la educación como una herramienta conectada a la realidad y a los afectos, que permita mejorar la calidad de vida de quienes aprenden, vuelve a salirse de los claustros académicos ortodoxos. Así desde el amor hasta los más importantes debates filosóficos aparecen otra vez en la currícula. Además, durante este año la facultad realizará un ciclo de conferencias con importantes figuras. Rosario/12 dialogó con directivos, docentes y alumnos que componen la esencia de la original propuesta.

Daniel Ligresti tiene 55 años y es alumno desde que comenzó el proyecto. "La facultad Libre tomada con responsabilidad es un abrecabezas impresionante en el que tipos realmente grossos bajan al llano para debatir sinceramente con los alumnos", asegura. Este año asistirá a las clases de León Rozitchner, un reconocido filósofo argentino y también cursará una materia dedicada al amor y la filosofía. "Es importante darnos un tiempo para reflexionar en cómo pensamos y qué pensamos sin aturdirnos". Daniel se dedica a la química industrial y asegura que las ciencias humanísticas siempre fueron una materia pendiente, pero dadas sus circunstancias nunca podría haber accedido a esos conocimientos en el ámbito académico formal. Aunque está agradecido, no deja de apuntar algunas falencias. En su opinión "durante el primer año la facultad libre realizó muchas más actividades gratuitas en los distritos para la gente de los barrios, pero este último tiempo fue cerrándose y sólo funciona entre bulevares, lo cual dejó afuera a muchos".

Rozitchner en diálogo con este diario opinó que "sería bueno que la ciudad pudiera colaborar para que sea una facultad de acceso social y no de elite, como está pasando". Respecto a la existencia de un espacio cultural de estas características el filósofo fundamenta: "La universidad oficial nunca tomó partido en función de nada de lo que nos ha pasado. No criticó la privatización de la medicina, Derecho no dijo nada cuando se nombró a una Corte Suprema de amigos y Economía tampoco dijo nada con la destrucción que nos causó el neoliberalismo. Entonces está bueno que exista un lugar donde estas cosas puedan debatirse".

Judith Echevarne es una profesora de Letras de 76 años y es un ejemplo de que para aprender no hay edad "Cada vez que asisto voy actualizándome y aprendiendo cosas nuevas. Es importante ir porque salimos siempre enriquecidos. La facultad convoca a pensadores de gran carisma, con una alta formación y para asistir no hace falta ostentar un título, puede ir cualquiera", sostiene. En su opinión, durante el primer año hubo una mayor diversidad de temas que poco a poco fue reduciéndose. Igual este cuatrimestre volverá a sentarse en las primeras filas.

Las propuestas del ciclo 2009 dejan entrever las temáticas que han generado mayor convocatoria. "El nuevo Materialismo" dictada por León Rozitchner, "El amor y la filosofía ﷓ Eros y ser ", a cargo de Esteban Ielardo, "Como pensar el mundo de hoy" por Gustavo Varela y "Filosofía y poder. De Platón a Sloterdijk", de Rubén Ríos, son las cuatro materias que se desarrollarán en el primer cuatrimestre. El dictado de clases será quincenal y se desarrollará en el Centro Cultural Bernardino Rivadavia, en el CEC y en la librería Homo Sapiens.

Por otra parte, Esteban Ielardo, licenciado en filosofía y a cargo de una de las materias más heterodoxas, aseguró que para asistir a la facultad libre hay que tener pasión por el saber. Explicó que el objetivo de su clase será hacer un recorrido cultural y filosófico sobre la naturaleza del Eros. "En las culturas que pertenecen al llamado horizonte místico, impera sobre el eros una dimensión sagrada y religiosa que se contrasta con la visión profana que tiene la cultura occidental del sexo. Allí el eros era una fuerza divina con la que el hombre se ponía en contacto a través del acto sexual. De hecho en la antigua Babilonia adoraban a Istar que era una diosa prostituta porque el sexo era una fuente de iluminación religiosa", explica. ¿Para que sirve conocer esto? "Para reflexionar. En nuestra cultura difícilmente el acto sexual transcienda el placer efímero y se transforme en una búsqueda espiritual", responde.

Respecto a lo que logra este espacio cultural Peirone sostiene que "resignifica la educación en un tiempo en el que los alumnos le preguntan a los docentes que sentido tiene la vida, los padres no saben que responder, y hay una inercia cultural muy importante". Y agrega: "Históricamente las cuestiones relacionadas a lo afectivo no estaban separadas de la educación. Hoy el amor no se debate en la Academia, pero Platón que generó el pensamiento occidental, debatía con Sócrates sobre el amor y la muerte. Y en tiempos de Aristóteles, la física y las matemáticas no eran cálculos y fracciones numéricas sino que estaban aplicadas a la vida real".

Cabe destacar que la mayoría de los alumnos de la Facultad libre son profesionales. Aunque los únicos requisitos para inscribirse son ser mayor de 17 años, saber leer y escribir y pagar un arancel de 120 pesos por mes. Además, este año realizará un programa de conferencias bajo el tema Como pensar la Argentina del bicentenario, en el que disertarán importantes figuras como Martín Caparrós, Pino Solanas, Luis Felipe Noé, Horacio González, Ricardo Foster, entre otros. El primer discursante será el intendente Miguel Lifschitz.