Sugerentes, polimorfos, fantásticos, los más jóvenes especímenes creados por Chachi Verona conforman Sobrenatural, la muestra que esta tarde, a las 19.30, quedará inaugurada en el Centro Cultural Bernardino Rivadavia (CCBR). Creadas entre 2007 y 2008, las criaturas sostienen esa línea personal y distintiva que Verona ha propagado por medios como Clarín, Página/12, La Capital y la revista Los Inrockuptibles, entre otros. Sin el contexto periodístico del que suelen estar acompañadas, las obras podrán visitarse hasta el 2 de agosto en la planta baja de San Martín 1080, y si bien los dibujos aparecen impresos sobre siluetas planas, la disposición en el espacio les da cierta sensación de tridimensionalidad. "En realidad creo que la muestra misma es una instalación, realizada en base a la gráfica y aplicada en esos diferentes formatos. Al tratarse de una intervención de espacio es una instalación. Y al mismo tiempo, las figuras que están colgadas, si bien están aplicadas sobre un plano, dan toda la idea de tridimensionalidad", apuntó Verona.

Para los seguidores del artista, ésta será una buena posibilidad de acercarse a las obras sin el marco informativo que suele estar asociado a los dibujos. Para Verona, representa la chance de mostrar a sus criaturas tal cual fueron concebidas: "Los dibujos los hago por una cuestión de disciplina, de que me gusta dibujar y de que siempre estoy haciendo cosas. Después los compagino y los armo para que estén en las ilustraciones. Por ejemplo, hay dos imágenes de vacas, una que está sobre calle San Juan y otra que es un mural donde hay una vaca con una boca gigante y un tipo la está echando. Esos dibujos partieron de observaciones de vacas una vez que estuve en Entre Ríos, y después las seguí deformando, no respeté el modelo, y yo lo que veo en esas vacas es a los piquetes del año pasado del campo, éso para mí está en esas obras".

La deformidad a la que hace alusión Verona es un patrón que se sostiene en las piezas que conforman Sobrenatural. "En realidad la deformidad tiene que ver con esto de apartarme del modelo aclaró . Generalmente cuando empiezo a dibujar parto de la forma de un insecto, de un animal o de una planta. Pero también la deformidad tiene que ver con los modos de pensamiento. Hay un montón de cosas de la sociedad que a mí me parecen completamente deformes. Esas figuras para mí son cotidianas y naturales".

Ese concepto se profundiza en el catálogo de la muestra, donde se reproduce una conversación entre el artista y el curador Guillermo Fantoni. Allí, Verona comenta: "A mí me parece que lo fantástico tiene que ver con un ejercicio permanente de la imaginación. Para mí es algo perfectamente normal, pero a veces la gente se asombra con estas figuras y personajes, y considera como normal la realidad que nos rodea. O sea, se sorprenden de ver que una protuberancia cónica le sale del ombligo a un personaje y les parecen normales costumbres o modelos sociales que a mí me resultan pavorosos, que tienen que ver por ejemplo con la publicidad, el capitalismo salvaje en general".

Y si de cotidianeidad se trata, Sobrenatural se rige por la monocromía imperante en todos los trabajos. Al respecto, el autor explicó: "El dibujo es algo que siempre trabajo con esta cuestión del blanco y el negro, con los bordes bien definidos, es algo básico de mi producción. Y se dio esto de poner todos los trabajos en blanco y negro por una decisión estética. A lo mejor no tiene una razón muy concreta, sino la habitualidad con la que yo trabajo en ese registro"