La nutrida convocatoria lograda con la presentación del nuevo número de La guía de Rosario fue un primer indicio de que la decisión tomada para su relanzamiento es acertada: a más de un año de su última aparición, la publicación de Fowler Ediciones se reforzó con la participación del Ente Turístico Rosario y sumó a Eber Ludueña como presentador. Embuido en ese personaje, el actor rosarino Luis Rubio fue el principal foco de atención en la conferencia realizada ayer por la mañana en el Salón Carrasco del Palacio de los Leones, en un acto que sumó al intendente Miguel Lifschitz y al presidente del Etur, Héctor "Pichi" De Benedictis.

Fue éste último quien explicó que el surgimiento del proyecto tuvo lugar hace un año, en el marco de la Feria internacional de turismo de Buenos Aires, evento donde se presentará precisamente esta nueva edición de La guía..., como parte de las actividades programadas en el encuentro que desde el sábado y hasta el martes se realizarán en La Rural. "Con Luis nos cruzamos el año pasado en la Feria y se nos ocurrió que podía ser una manera distinta de mostrar la ciudad. Una ciudad que no puede ser mostrada con teatros a la italiana vacíos, sino ocupada por la gente, donde la gente la disfruta --apuntó De Benedictis--. También me parece que el humor es una de las características vitales de esta ciudad. Hemos trascendido gracias al humor de grandes como Olmedo y Fontanarrosa, y Eber es un personaje querible, de un artista rosarino que ha trascendido la ciudad. Nos parecía que podía ser interesante mostrar la ciudad de una forma distinta".

Lejos de desconocer el plus que, desde el marketing, implica la presencia del carismático e hilarante Eber Ludueña --ese perdedor nato, nostálgico de los 80, futbolista poco virtuoso, lateral siempre a destiempo--, De Benedictis consideró que ésta puede ser una experiencia a repetir: "Creo que la ciudad se puede mostrar a través de otros personajes, si estuvieran vivos Olmedo o Fontanarrosa serían personajes ineludibles. Uno podría hablar con Messi para que haga algo, pero insisto con la idea de desacartonar. Me parece que es el valor agregado que puede tener. Pero no hay que descontar que más adelante podamos hacerlo con otros personajes, como Luciana Aymar, gente que nos proyecte".

Divida en segmentos, La guía de Rosario combina historia y geografía con la oferta gastronómica, cultural y de entretenimiento que la ciudad brinda a los visitantes. Entre medio, Eber Ludueña se pone en la piel de un mistery shopper para realizar un informe encargado oportunamente por la Universidad de Thermopolis, en Wyoming. En sus intercambios con el decano de esa institución, Eber logra pintar la ciudad desde su óptica entre looser y glamorosa. "Dicen que, sin el río, Rosario no sería Rosario. Que sin sus parques y paseos, no sería Rosario. Que sin su cultura, su patrimonio histórico, no sería Rosario. Que si estuviera en Noruega, no sería Rosario. Tampoco sería Oruro. Podría ser Oslo", escribe Eber, previo a hacer su propio repaso por ésos y otros ítems.

Este domingo, el proyecto tendrá su presentación formal en la Feria internacional de turismo de América Latina, donde editores y autoridades municipales sumarán a Eber Ludueña en su recorrida por el predio rural porteño. En ese plan de promoción, la ciudad propondrá además un atractivo sistema de video interactivo, sobre el que De Benedictis adelantó: "Es un trabajo que estamos haciendo con escultores y diseñadores rosarinos. Vamos a llevar tres vehículos muy particulares, que representan tres modos de recorrer la ciudad. Una es en barco, mostrando al Monumento desde el río, las islas por dentro, La Florida, el Parque España, la navegación. Después se recorre la ciudad a través de un trolebús muy lindo, donde te subís y al mover el volante empezás a recorrer. Por último una bicicleta, porque es muy importante mostrarle a la gente que Rosario es una ciudad muy amigable. La bicicleta tiene un sentido importante hacia el turismo en relación a su amigabilidad".