Aun antes de ser La Bruja --sobrenombre que carga ya desde niña--, para María de los Angeles Salguero La Rioja ha sido el paisaje, la historia y la cultura que marcaron cada una de sus interpretaciones. En su reciente disco Caja de luna la cantante volvió a sumergirse en las músicas de su provincia natal para presentar a nuevos autores, reinterpretar viejos ritmos y demostrar su capacidad de cruzar géneros sin perder el respeto y amor por las raíces.

Raíces que se imprimen desde la tapa misma del disco, con una fotografía que refleja diversos elementos, según distinguió la cantante a Rosario/12, en una entrevista en la que adelantó además las características del show que este sábado, a las 21.30, ofrecerá en la Sala Lavardén de Sarmiento y Mendoza. "La tapa es minimalista, e intentamos resumir en ella lo que es la esencia de la cultura riojana. La colchita es un tejido artesanal de tejedoras de la localidad de Chamical, y la caja chayera que tengo en mis manos es de Tona Páez de Chilecito, una cantora de vidalas que crea sus propias cajas", apuntó.

Ya en relación a la gestación de su sexto material de estudio, Salguero relató: "Cuando uno está terminando de grabar un disco, inmediatamente empieza a planificar un nuevo proyecto, una nueva producción. Eso es lo que pasó en el disco anterior. Había terminado de grabar Flor de retama, con arreglos de Daniel Homer (NdR: material que le valió el premio Clarín como Revelación Folklore), donde me sentí muy satisfecha por lo que habíamos logrado, por esos arreglos que tienen que ver con fusiones que se dan dentro del folklore y que Daniel pudo lograr de manera magnífica. Decidí entonces dar un paso más allá, que tiene que ver con fusionar el folklore con el jazz y el rock, porque sentía que por ahí algunos ritmos de mi provincia, como la vidala chayera o el chuntunqui que tienen un rasgo y una fuerza particulares, se asemejaban a estos otros estilos".

Tomada esa determinación, Salguero fue a la búsqueda del guitarrista Ernesto Snajer, quien finalmente asumiría la dirección musical y arreglística del proyecto. "Empezamos a trabajar y a seleccionar el repertorio para que él conociera los ritmos tradicionales de mi provincia, y sobre todo la cultura y la idiosincrasia --explicó--. Por éso trabajamos mucho tiempo, le dí a conocer no solamente los compositores y autores, sino también la cultura riojana. La idea, justamente, después de haber grabado cinco discos, fue buscar nuevos compositores, que son muy jóvenes pero que vienen trabajando hace un tiempo. Es el caso de Ramiro González, de Juan Arabel, de Naya Ledesma que es una compositora hija de argentinos y mexicanos. Luego, por supuesto, algunos que ya vienen trabajando y mostrando una propuesta innovadora, como el Dúo Orozco-Barrientos, el Topo Encinar de Tucumán y Néstor Soria".

A esas creaciones de nuevos autores, sumó "La atardecida" de Leguizamón y Castilla, "El otro camino" de Raúl Carnota, "La chumba i' pilla" de Chacho Hunicken, "Hecha sueño en las conanas" de Pancho Cabral, "Sembrando sueños" de Pini-Kozicki-Delgado y la vidala "Y voy cantando al andar" de Héctor Negro y Carmen Guzmán. Cada una de esas obras es atravesada por el sentimiento que le imprime la cantante, que junto a Snajer seleccionó diversas formaciones para darle el color adecuado a las composiciones. "Creo que cada tema tiene una personalidad diferente, y éso es algo muy importante que logramos en este disco. Y además de la conjunción que ha logrado Ernesto con los diferentes estilos, está el trabajo que hizo Sebastián Perkal, un ingeniero de sonido que ha ganado varios Grammys y le ha dado un toque particular respecto al tratamiento de la voz e instrumentos, algo que estamos logrando en vivo y nos da muchas satisfacciones", concluyó Salguero, que en su paso por Rosario buscará sostener esos colores junto a Mariano Delgado (guitarra), Guido Martínez (bajo), Pablo Budini (guitarra), Facundo Guevara (percusión) y Víctor Carrión (vientos).