Con la habitual entrega de diplomas a los participantes de los diferentes cursos dictados por el grupo organizador del Experimenta teatro, el Rayo Misterioso, cumplió con la última parte de la decimotercera edición de su ya clásico Encuentro Internacional de grupos teatrales. Venciendo a los fatalismos numéricos y al tormentoso diciembre que dejó durante un día, la sala sin luz, las huestes de El-Jatib confiaron en sus propias luces para iluminar la función de "Dionisos aut" que se llevó a cabo sorprendiendo a todos.

Como tituló el colega Héctor Puyo de la Agencia Télam, en uno de sus elogiosos informes: "En Experimenta 13 el temporal no se llevó el buen teatro". La programación se cumplió más allá de las deserciones y los contratiempos, con esa habitual capacidad organizativa que caracteriza a uno de los grupos de mayor trayectoria teatral de Rosario.

"Cuando ya se suponía que la función de 'Dionisos aut' debería suspenderse y las sesiones de 'desmontaje' de las obras del día anterior, comandadas por el especialista Julio Cejas, se realizaban a la luz de las velas, un generador portátil permitió que se alzara el hipotético telón" -dice Puyo en su informe del día 11, confirmando el interés que sigue despertando en la prensa nacional la modalidad de trabajo del grupo rosarino.

Una vez más el grupo anfitrión se permitió a pesar de la falta de tiempo necesario para lograr los ajustes que requiere la exigente dirección de Aldo El-Jatib, estrenar su último trabajo: "Shock Ilión", un friso de la guerra ancestral de Troya enmarcado en un despliegue actoral que ratifica la solidez de un grupo convencido de una línea estético﷓ideológica plasmada en el trabajo diario.