Tras el tan concurrido cierre del Festival Latinoamericano de Videos y Artes Audiovisuales, que durante una semana y media ofreciera no sólo una programación en base a films, sino también abierta a seminarios, paneles de discusión, debates, con la presencia de invitados de nuestro país e internacionales, y a partir de una cartelera de estrenos que en los últimos tiempos muy poco tiene que ofrecer, las expectativas, sobre todo, siguen estando en las salas alternativas; por lo que, siempre debemos estar atentos, los amantes del cine a leer en los diferentes medios, día a día, esas tan significativas propuestas.

Afortunadamente son estas salas las que no se hacen ecos de las modas no de los cantos de sirena de la gran industria. Los estrenos de este último jueves ﷓y esperemos que en estos días se produzca algún giro radical﷓, nos arrojan violentos puñetazos de hierro y se lanzan tras cacerías macabras. Ya nada se sugiere, todo se vuelve desaforadamente gore y sólo falta lanzar los cadáveres en medio de la platea.

Los últimos films argentinos estrenados, desde mi punto de vista, no pasan de repetir las fórmulas a las que ya nos tienen acostumbrados. Hasta cuándo Francella jugará a ser él mismo como lo sigue haciendo ahora, en este exceso de bonhomía demagógica, que compone en "Corazón de león", un film que en manos de Marcos Carnevale marcaba otras expectativas. Y ya desde el afiche, un grandilocuente Ricardo Darín se eleva por encima de la ciudad, diciendo sí, soy yo, la estrella, ahora en "Sèptimo" un previsible, insípido y moralizante retrato de familia en clave de thriller, sobre la base de ese rol que últimamente tanto repite, tratando de transmitir algo que el guión no puede sostener y que, desde el exceso de la banda sonora, espanta. Ni qué decir de los dos últimos dados a conocer el pasado jueves: "Sólo dos" y "Quiero morir en tus brazos".

Tal vez, el primer viraje respecto de nuestro cine pueda darse el próximo jueves con el nuevo film de Lucía Puenzo, recientemente presentado en numerosos festivales, entre ellos Cannes, y ya invitado a San Sebastián y Montreal, entre otros. Y es que con "Wakolda", la realizadora de "El niño pez" y "XXY", basado en una novela de su propia autoría, la hija del director Luis Puenzo se interroga sobre la figura de Mengele, el Angel de la Muerte, desde un relato que se construye como un relato itinerante y que abre a un juego de perversa seducción. Definido por su autora como "un texto tóxico", el film que contempla en el reparto a figuras como Natalia Oreiro, Diego Peretti, Elena Roger, Alex Brendemul, Florencia Bado, vuelve a echar luz sobre los aspectos que llevaron a que numerosos sobrevivientes cómplices del nazismo encontraran asilo, aquí, en este país; asumiendo otras identidades, como ya lo denunciaron numerosos investigadores.

Y nuestra semana, en materia de reposiciones, como es habitual, la inaugura la sala Madre Cabrini. Durante más de un cuarto de siglo y desde la media tarde -ocasionalmente, desde más temprano- ya esta tan entrañable sala atendida de manera familiar por Jorge Debiazzi y Señora, Miriam, abre sus puertas. En la función de hoy, luego del western "La furia de los siete magníficos" que se anuncia a las 18.30, ambientada en suelo mejicano, con George Kennedy y Fernando Rey, entre otros, se podrá ver nuevamente, a las 20.30, al gran Alberto Sordi, ahora en una comedia de 1971, "Novia por correo", film estrenado a posteriori de "Detenido a la espera del juicio" de Nanni Loy y un año antes de que diera a conocer "Sembrando ilusiones" de Luigi Comencini, ambos films ya presentados en esta sala.

Comedia de equívocos, dirigida por Luigi Zampa, recordado por "Una cuestión de honor", entre tantas otras, "Novia por correo, fue co-escrita por el guionista habitual de los films en los que encontramos a Alberto Sordi, Rodolfo Sonego y la banda sonora, de esta historia que se mueve entre Australia e Italia, fue compuesta por Piero Piccioni.

En la medianoche del lunes, ciertamente deseamos seguir viendo cine﷓ como decía y declamaba Guillermo Cabrera Infante en "Arcadia todas las noches". Y Canal 7 nos propone en esta semana dedicada al policial argentino, "Tiempo de revancha", film del 81 de Adolfo Aristarain, realizador que ya desde los títulos finales de su primer film, "La parte del león", estrenado en el nefasto 1978, rinde homenaje a los maestros del género.

Por lo tanto, hoy, en este film que el programa "Filmoteca-Temas de Cine", nos ofrece, conducido por Fernando Martín Peña y Fabio Manes, y que mereciera aplausos cuando su estreno (recuerdo la efusividad, la recepción, sobre el final de la proyección en el cine Gran Rex), Adolfo Aristarain nos ofrece, en los años de la dictadura, el primer film que muestra la gran corrupción existente en las multinacionales y la impunidad que gozan, a través de una historia que conjuga la historia de dos amigos enfrentados a diferentes poderes, las luchas gremiales, el sindicalismo. En este relato que cuenta con las actuaciones de Federico Luppi, Ulises Dumont, Haydee Padilla, Julio De Grazia, Ingrid Pellicori, Arturo Maly, no están ausentes, de manera oblicua, los símbolos de la represión, como la de un Ford Falcón sin patente, desde donde se arroja el cuerpo de alguien ya asesinado.

Y para mañana, al volver a la sala Madre Cabrini, los terrenos de la Rusia imperial reservan una riesgosa aventura. A las 18.30, de Carmine Gallone, "Miguel Strogoff, el correo del zar" con Curd Jurgens, Genevieve Page y Sylva Koscina. Y a su término, aquí, nuevamente, el gran comediante, la gran máscara del cine italiano, Totó, maestro de maestros, heredero de tantos personajes de la Comedia del Arte, ahora en este film de 1956, "La banda de los honestos", dirigido por Camillo Mastrocinque, con las actuaciones de Peppino de Filippo, Nando Bruno, Memmo Carotenuto, entre otros.

Y al volver frente a la pantalla chica, en este pendular cinéfilo, tenemos la posibilidad de ver, siempre a la medianoche del martes 17, por el mismo canal 7, en el programa Filmoteca, uno de los grandes policiales de culto del cine argentino; para Adolfo Aristarain una obra maestra, junto a otros como "La fuga" de Luis Saslasvki, "Fuera de la ley" de Manuel Romero, "La bestia debe morir" de Román Viñoly Barreto. Nos referimos al film de Carlos Hugo Christensen, "La muerte camina en la lluvia", estrenado el 7 de septiembre del 48, co-guionado con César Tiempo, a partir de la novela "El asesino vive en el 21" de André Stanislas Steeman, que ya había sido llevada al cine en el 42 por Henri-George Clouzot.

En el recorrido del cine argentino, el nombre de Carlos Hugo Christensen ocupa un lugar muy relevante, sin embargo es muy escasa la bibliografía existente sobre el realizador. Su labor profesional se inicia en 1939 y desde ese años transita por diversos géneros, ofreciendo un modo diferente de tratamiento tanto en la comedia como en los melodramas, entre los que se destacan " Los pulpos", "Safo, historia de una pasión", Armiño negro". Sus policiales se basan en cuentos y novelas de autores extranjeros, en su mayoría, y entre ellos, su favorito, es William Irish, de quien llevó a la pantalla, " Si muero antes de despertar" y " No abras nunca esa puerta", ambas de 1952. Recordemos por otra parte que Christensen (Santiago del Estero, 914-Río de Janeiro, 1999) en dos oportunidades desató una gran polémica. En un primer momento, en 1946, cuando el estreno de "El angel desnudo" sobre un guión de César Tiempo, a partir de la novela "Fraülein Else" de Arthur Schnitzler, con Olga Zubarry en el rol estelar, quien se mostraba en su"natural desnudez", para intentar salvar a su padre de la ruina económica. Junto a ella, en el elenco, Guillermo Battaglia, Carlos Cores y Eduardo Cuitiño, con esculturas de Aquilio DeMarchi. Y ya en 1980 cuando llevó al cine el cuento de Jorge Luis Borges, "La intrusa" al dejar asomar elementos homoeróticos en la relación entre los dos hermanos, lo que provocó una gran reacción aireada del recordado escritor.

En "La muerte camina en la lluvia", antológico policial negro retratado en un sugestivo e hipnótico blanco y negro por Alfredo Traverso, la pensión "Babel", alegórico y enigmático nombre que nos abre sus puertas, es el espacio que aloja a un excéntrico asesino que está conmocionando a la opinión pública, que abre los ojos a una incesante pesadilla. En una nota crítica leemos " A partir de un comienzo de corte radiofónico el film se propone, en parte, como un juego....Y en esa atmósfera se sugiere intensamente lo siniestro...".

Una vez más Olga Zubarry y Guillermo Battaglia encabezan el elenco, acompañados ahora por Margarita Corona; Eduardo Cuitiño, Nicolás Fregués, Amalia Sanchez Ariño, Horacio Peterson, entre otros.

En 1996, Christensen comenzó la filmación de "La casa de azúcar", sobre el cuento homónimo de Silvina Ocampo. Filmada en Río de Janeiro, nunca pudo ser estrenada y el material rodado quedó en los archivos del autor junto a otros proyectos no terminados, tales como los que corresponden al guión de "El salvaje", sobre el cuento de Horacio Quiroga, "El impostor", a partir del cuento de Silvina Ocampo, " Os Noivos da Morte", versión de la pieza teatral "El Señor Galíndez" de Eduardo Pavlovski.