Las situaciones límites pueden atravesar y tensar las creencias más sólidas y las costumbres más antiguas, algo parecido a lo que les pasa a Marcelo y Valeria, una pareja vegana que se pierde en el campo y debe enfrentarse nada menos que con una vaca, tal cual la historia creada y recreada por los actores Mumo Oviedo y María Belén Ocampo en "Ni una vaca menos".

Escrita, protagonizada y dirigida por estos dos creadores rosarinos, la obra se estrenó este viernes en el Teatro Pichincha (Vera Mújica 214) y es según sus responsables "una comedia con mensaje en verso campestre y ukelele, que dice: los chetos sean unidos, esa es la ley primera, si los chetos se pelean, los devoran... las vacas que aniquilan".

La obra que podrá verse todos los viernes a las 22 en esa sala, nace a partir del deseo de trabajar juntos -dice a Rosario/12 la actriz María Belén Ocampo-, "para lo que armamos en principio una escena breve, buscando imágenes y situaciones que nos resulten atractivas escénicamente".

Con respecto a la vigencia que tienen cuestiones como el veganismo, Oviedo coincidió en que este tema está de moda, como la meditación y otras prácticas que aborda la propuesta, que tienen mayor presencia en esta generación y logran cierta identificación con determinado público.

"Siempre pensamos que estos dos personajes: Marcelo y Valeria, podrían haber sido, dos acérrimos defensores de Greenpeace, dos hinchas de fútbol insoportables, dos militantes sordos. Pero se encontraron siendo veganos, lo que en realidad ponen de manifiesto, es una devoción por este estilo de vida sin estar demasiado informados, más bien llevados por una moda que los envuelve y de la que quieren formar parte", dice Belén Ocampo.

Por su parte Mumo Oviedo que participó en "Arlequín, servidor de dos patrones", "Mil quinientos metros sobre el nivel de Jack", entre otros trabajos donde se destacó por su histrionismo, coincidió con Ocampo en destacar que el tema del veganismo es un disparador para hablar de la necesidad de la pertenencia a cierto grupo, de "el estar a la moda".

"No decimos que todos los veganos sean así, la mayoría por suerte están muy lejos de ser lo que son Marcelo y Valeria; el fanatismo tiene mucho que ver en la historia".

Los dos protagonistas de "Ni una vaca menos" se conocieron en el exitoso "Show de Cindy Lemas", convocados por Lumi Palavecino y desde ese momento entablaron una enriquecedora tarea que les permitió abordar esta propuesta donde se complementan en la actuación, la dramaturgia y en la dirección del espectáculo.

"Nos presentamos a Cosecha Escénica y quedamos seleccionados, algo nos decía que íbamos por buen camino y empezamos a trabajar mucho ;en ese momento no había lugar para uno más; y por eso quizá nos arriesgamos a asumir la dirección además de actuarla y escribirla, algo inédito para los dos; pero nos entusiasmaba el desafío y acá estamos llegando ya casi al estreno con esta "obra de "como nos gusta nombrarla", dijo Belén Ocampo a este diario.

-Una vez más el humor pero remontando el mero divertimento...

-Partimos desde el humor definido como el modo de presentar, enjuiciar o comentar la realidad. Resaltamos el lado cómico, risueño o ridículo de las cosas, decidimos poner en escena a dos personajes "muy" veganos, en una situación completamente extrema para ellos. Tomamos una circunstancia posiblemente real para exagerarla hasta tal punto que se convierte en ridícula", explicó la actriz de "Amaras a tu padre por sobre todas las cosas" y "El malentendido", obras dirigidas por Carla Saccani.

Escapando de ella y la tentación, pasando por distintas discusiones, reflexiones y situaciones absurdas, terminan dándose cuenta de que viven escapando del resto de la sociedad.

En "Ni una vaca menos", según sus responsables, los personajes escapan de una vaca que les comió toda la comida, para no ceder a la tentación de comérsela, a partir de ese conflicto, pasan por distintas discusiones, reflexiones y situaciones absurdas, para terminar dándose cuenta de que viven escapando del resto de la sociedad.

Refiriéndose a la forma de trabajo y a las anteriores performances donde trabajaron juntos, Mumo Oviedo destacó la diferencia a la hora de la relación entre el público y el espectáculo.

"En los otros trabajos siempre le hablamos al espectador, incluyéndolo todo el tiempo, compartiendo hasta el mismo espacio. Ahora en cambio trabajamos sin romper la cuarta pared. El público no existe, en esta oportunidad no estamos ni en un bar ni en un teatro: Estamos en un descampado, lejos de todo", dijo el actor.