La sombra del primero (y otras canciones intratables) es un disco destinado a esperar su tiempo. Sin ir más lejos, más de una década aguardaron sus canciones para que Dani Pérez, el creador, finalmente las registrara, convirtiendo ese repertorio en su primer disco solista. Compuestas casi en simultáneo con las obras de Promesas, mentiras y café (que en 2007 significó el cuarto lanzamiento de la discografía de Los Sucesores de la Bestia, la banda fundada por el cantante en 1996), las once canciones de La sombra del primero se publicaron en 2015 como parte de un disco-libro que se completa con Hablar sin saber, donde Pérez saca a la luz textos íntimos, personales. Un año después de esa edición (gestada mediante el programa estímulo Espacio Santafesino), este miércoles el cantante, guitarrista, tecladista, compositor y productor presentará finalmente, y en carácter oficial, su proyecto solista.

Sin embargo, y a diferencia de algunas actuaciones realizadas poco después de la aparición del libro-disco, esta vez no estará solo Dani Pérez, que interpretará sus obras junto a Los Ultimatums, grupo que permitirá recrear la sonoridad del disco y que está conformado por... Los Sucesores de la Bestia. "El sonido está basado en lo que grabé solo, aunque suene a banda está grabado por mí, y esta vez, por primera vez, lo vamos a tocar con la banda completa, así que va a sonar como el disco... hasta mejor", anticipa el músico rosarino sobre ese encuentro, que el miércoles próximo se desarrollará desde las 20.30 en la Terraza de la Cúpula de Plataforma Lavardén (Mendoza 1085) y que contará también con la participación del músico bonaerense Pablo Krantz.

El lanzamiento oficial tendrá además carácter performático, lo que permitirá darle presencia a algunos de los textos de Hablar sin saber. "Ya que es un disco corto, le pedí a Rubén Bussi que grabara unos audios de algunos textos del libro. Lo que vamos a hacer es disparar esos audios, que voy a intervenir, va a haber un bailarín bailando en cada uno de esos textos (Viki Tuttolomondo, Diego Stocco y Luciana Cattalin) y la banda va a improvisar arriba. Es una cosa medio performática que va a permitir que el libro esté presente dentro del show", adelanta Pérez, que en esta ocasión se focalizará en su rol como cantante para interpretar las once obras de La sombra del primero, con el respaldo que significa la presencia de sus secuaces sucesores.

"La premisa era recrear el disco tal cual estaba, primero que nada nos abocamos a éso, y a partir de ahí hay algunas variaciones de acuerdo a lo que la banda propone", indica el compositor, y remarca: "Hay que recordar que Sucesores es una banda bastante versátil. Durante mucho tiempo tocamos Promesas, mentiras y café que en cierta medida tiene algún link con el disco solista, ya que son canciones de la misma época. La estética es de pocos elementos sonando a la vez. Creo que todos están bastante cómodos con la forma de las canciones, más allá de que no es el sonido de Sucesores, que en este último tiempo está tocando mucho más fuerte".

Para Pérez, el concierto del miércoles significará un nuevo reencuentro con esas canciones compuestas entre 2004 y 2005, pero que no encontraron cabida en los discos de su banda (a Promesas... lo sucedió en 2010 el doble Esto no es funk/Esto es head rock). "Este disco intenté dejarlo hacer pasar --admite--. Venía de un proceso bastante decepcionante, que fue el de armar Audio Buró. Dentro de ese panorama fue cuando se grabó La sombra del primero. Una vez que lo terminé estaba un poco asqueado... cumplí con lo que tenía que cumplir. Hice el experimento y en ese momento me acuerdo que estaba sorprendido de que hubiera salido bien".

Tres meses dedicó el compositor y productor para grabar en solitario esas canciones, para mezclarlas, masterizarlas y editarlas. Y volvió a dejarlas correr por sí solas. "Lo dejé en manos de la gente que quisiera escucharlo", admite su creador, que en este último año fue redescubriéndolas a partir de las devoluciones logradas: "El hecho de que estén grabadas en el disco, de esa manera que me gusta mucho, hace que adquieran otro nivel, las expone a la opinión de las personas. De golpe canciones que uno intuía iguales a otras parece que no, que van despegando, como 'Siempre libre', 'Yo soy mañana' o 'Tené cuidado, yo podría destrozar tu corazón'. Todo el mundo me dice que son temazos, canciones muy buenas, pero antes de grabar La sombra... eran algunas canciones más dentro de una carpeta interminable de canciones que fui escribiendo en estos veinte años de ser músico, de componer".

En esas dos décadas, Dani Pérez supo hacer de la música su esencia vital. Como productor, como frontman de su histórica banda, y también como autor de estas canciones a las que, ahora sí, parece haberles llegado su tiempo.