Luego de El tiempo de una vida, Juan José Sebreli vuelve con un nuevo ensayo filosófico: El olvido de la razón (Sudamericana). Derrocando mitos, el autor de Buenos Aires, vida cotidiana y alienación, Crítica de las ideas políticas argentinas y El vacilar de las cosas, entre otros títulos, se sumerge en un análisis de algunos de los conceptos que subyacen en las llamadas "corrientes del pensamiento". A lo largo de poco más de 400 páginas, el pensador se mete en la compleja pero gratificante tarea de poner en duda concepciones atávicas de la filosofía clásica y contemporánea, enturbiando sentencias, desnudando fervores.

"El hilo que conduce la trama de este ensayo es la crítica del irracionalismo y de la antimodernidad predominantes en vastos sectores del pensamiento de origen europeo. Estas corrientes se han confundido muchas veces con modas intelectuales que tienen su propio significado en tanto reflejan, aunque de modo frívolo, problemas de acuciante actualidad", explica Sebreli en el prólogo del volumen.

Recurrente en su obra, la crítica del irracionalismo ha sido planteada desde la perspectiva de la historia de las ideas políticas y sociales en El asedio a la modernidad (1991) y desde la estética y la sociología del arte en Las aventuras de la vanguardia (2000).

En este trabajo, Sebreli propone concretamente un retorno al humanismo como filosofía y como valor, en respuesta al ataque que a la historia, el sujeto y la universalidad, dieron el estructuralismo y el post﷓estructuralismo así como también aunque por motivos diferentes el positivismo y el neopositivismo.

De Nieztche a Foucault, de Dostoievsky a Barthes, de Heidegger a Sartre, el autor transita corrientes y escuelas revelando a través de un análisis de las coyunturas políticas e incluso personales de las figuaras más emblemáticas de la historia de la filosofía, veladas intenciones. Un arco entre análisis y discusión permite comprender el curso de la filosofía cercana.

(El olvido de la razón se presentará mañana a las 19.30, en los altos de Librería Ross --Córdoba 1347--, con la presencia del autor y comentarios a cargo de Jack Benoliel).