* Imposible suprimir de nuestras cabezas la voz del locutor que el 24 de marzo de 1976 anunciaba el golpe de estado cívico/militar. Era una cuerda entrañable salida de nuestras entrañas , argentina, de radio teatro bestial, ya acostumbrada al engolamiento y la reiteración en el timbre y el tono de tantos golpes que nos eran enterados por radio y luego por tele. La oyó mientras hacía la tarea. Gramática y sonaba Spinetta en el tocadiscos. Se quedó quieto y luego, me empezó a caminar por toda la casa. Se tuvo que empezar a mover porque tenía miedo y porque a su vez estaba excitado de que las cosas se habían volcado definitivamente en el tapete de las malas sombras, para ser desmembradas, clasificadas y que por fin el diablo daba la cara. Antes que sufrir la agonía era mejor este sacarse la careta, pensó. "Todas las hojas son del viento", cantaba Luis desde el disco, inocente como tantos

* La voz, esa voz dando un discurso. Martínez de Hoz le recordaba a algunas otras que había escuchado de casualidad en casas importantes: La voz de un padre retando a su vástago por el uso indebido del Mercedez Benz, la de un tío de un compañero de claustros bebiendo whisky en el salón de té. Una voz mierdosa, poco viril y desagradable: La voz de los hijos de puta, dedujo, pero con eso no le alcanzaba. Hay voces que dan miedo y ganas de que se acaben por siempre así te estén diciendo buen día. La voz de lo Oscuro.

* A Macri, cuando habla, se le empastan las cuerdas vocales y su tonito de concheto exasperante remueven salvajadas de la horda que el tipo prefiere ni decir. El tono, el modo remiten a una imagen incomprensible para el que lo padece cada vez que aparece hablando, y rememora a un niño que aún esta mamando, que su madre no le diera la teta, de ahí su empaste y la boca fruncida como un culo insatisfecho.

* Viernes a la noche, sin televisión, solo radio y el frío: El radioteatro llegaba de Buenos Aires y lo auspiciaba una marca de legumbres. El se imaginaba esas voces viajando por los hilos en la ruta, chiporroteando sobre la llanura medios tonos, ruidos de la foresta, pasos, gruñidos y aullidos. Se juntaban con su padre a oir a Narciso Ibañez Menta en una emisión de Cuentos de Terror. No dormía en paz debido a esas voces pero bien valía la pena: La sangre en movimiento y la imaginación otorgaban un fluído mágico de vitalidad y de embrujo.

* Vive ella en un primer piso entra a trabajar a las 9. Pero temprano, amparados por las vereda de un bar los ñoquis que cercan la oficina municipal de enfrente se reúnen antes de entrar al sitio donde nada harán. Ella ha salido dos o tres veces al balcón para recriminarles que no hablen tan fuerte pero esas voces siguen y siguen. Una mañana les arrojó un vaso de agua. Se enojaron y bajó en camisón: !Lo que les critico no es sólo las voces y el tono que usan, sino las pelotudeces que hablan!. Y les tiró sobre la mesa un libro de Shakespeare.

* Lilita Carrió, nombre de niña, carne de caverna, monstruo delirante y profuso. Ser peligroso y viral, desierto y venenoso, oscuro y tan terrible como el Mal, el verdadero mal que dice ella combatir pero que tanto y tan bien encarna, en su figura, en su voz terrible de profetiza de lagunas muertas y cementerios nocturnales. A los pragmáticos les da gracia. A los espiritistas recelo. A algunos crédulos pavor.

*Miguel del Sel, con su voz de vestuario, de arquetipo del malparido y embroncado por el mundo, de canchero argento, medieval y asqueante, encarna la peor de las voces que han aparecido en la escena de la política. Además de lo que suele opinar. Un libro de Cervantes sería poco: tal vez una tonelada, para que se calle o forjar con esos escritos sagrados la decorativa tumba donde irá su foto, de ser posible de espaldas, porque además de ser gorila, pedante, homofóbico, ignorante, machista, demagógico e irrespetuoso, es feo, muy fiero el pobre. Y la voz es proporcional al horror de verlo. Siente escalofríos de solo imaginarse que la empieza a acariciar. Dice que se va a ir del escenario político, pero su voz seguirá ensuciando su recuerdo de mujer.

* En algunos estados de USA donde está permitida la inyección letal están que trinan: desde Europa no llega el químico poderoso que ellos importan. Y como las electrocuciones espantan a la buena gente, han optado por el fusilamiento. Suena más digno, así sea injusto, depresivo, maldito. La última voz humana que el reo va a escuchar será la del tipo que ordena la ejecución. ¿No cargará su karma con ello? Vaya uno a saberlo.

* Uno anda cerca del estadio visitante y sabe que el partido se juega solo con hinchada local. Se aleja, faltan tres minutos y están aguantando el peloteo y el cero a cero. Apaga la radio. Antes de subirse al auto percibe el aullido más temido: Un grito ululante de festejo. Sabe que es un gol. Y del enemigo. La peor de las voces del horror en este domingo de otoño.

* La voz era fea como de una urraca. Era la voz de la madre del dueño de la pelota llamándolo a su casa con rabia: La interjección horrorosa lo situaba en oena profunda: Quedarse sin el balón, ver la humillación del pibe bajando la cabeza y pidiendo disculpas por tener que llevarse la pelota y percibir el rencor acumulado por siglos en esa voz inquietante de gente que no tendría que haber nacido siquiera. Hasta que pudo digerir aquello el mundo era en ese instante un lugar apestado y propicio para cometer un crimen.

* Abonizio, ¿por qué escribe tantas cosas depresivas en el diario? Me ausculta la dama mayor, interesada de verdad en mi y mi escribir. "Porque dentro tengo una voz oscura que me maneja y me obliga a hacerlo", le contesto dramáticamente. Ella, dándose por satisfecha replica y se va, muy oronda. "Ya me parecía que estaba embrujado".

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