Miércoles, 1 de octubre de 2008 | Hoy
El planteo de José Natanson, (Página 18 de Página 12 del 29 de septiembre de 2008) calificando como una quimera las proyecciones de Pino Solanas respecto a la recuperación de los trenes merece una reflexión, porque quimera sería plantearse o imaginar como posible algo que lo no es, pero que en este caso es demostrable la factibilidad de la recuperación de los trenes, si a partir de la decisión política del gobierno nacional, se aplica una línea coherente de gestión administradora y se ponen sobre la mesa todas las cartas en juego.
En primer lugar habría que profundizar la investigación del destino de los bienes ferroviarios administrados por el ONABE y una prolija rendición de cuentas de los ingresos y destinos de los provenientes de los talleres ferroviarios desmantelados, identificando los destinatarios, prosiguiendo luego con una auditoria sobre -por ejemplo- el manejo del Belgrano Cargas, el cumplimiento de las inversiones del resto de los concesionarios y una revisión de todo el sistema de transporte terrestre ferroviario o automotor, para determinar las licitudes e ilicitudes de dichas concesiones, anulando las que hayan resultado lesivas al interés nacional.
Si nos estamos planteando con seriedad el tema de las escasas reservas petroleras del país y la necesidad de desarrollar fuentes de energía sustitutivas, pero aceptamos como inevitables las actuales distribuciones de las cargas y de pasajeros del sistema de transporte nacional y no tomamos medidas de fondo en este tema fundamental, diferiremos los problemas y seguiremos lamentando las mismas cosas que hoy nos agobian desde las tapas de los diarios, los noticieros radiales o televisivos en los que se registran los incrementos de la siniestralidad de nuestras rutas y autopistas y continuaremos despilfarrando combustibles líquidos.
El planteo de la película de Pino Solanas, que indigna al espectador por las suma de denuncias de corrupción que no han sido investigadas por nuestra justicia, por las actitudes pasivas y cómplices de algunos funcionarios de altas responsabilidades en el control de la cosa pública, reporteados por el cineasta. No da lugar al pesimismo y la bronca y rebeldía que genera se está canalizando en un crecimiento de las firmas a las planillas de adhesiones de Tren para todos.
Quienes tenemos fundadas razones para apoyar el proyecto de tren para todos, apostamos a que los trenes volverán a circular por cuestiones del mínimo sentido común que nos indica que el desmesurado crecimiento del parque automotor colapsará toda la estructura vial y obligará a tomar urgentes medidas correctivas, especialmente como protección a la vida.
Angel M. Contestí
© 2000-2022 www.pagina12.com.ar | República Argentina | Política de privacidad | Todos los Derechos Reservados
Sitio desarrollado con software libre GNU/Linux.