Italianos

Quiero expresarles mi preocupación, y la del MAIE, Movimiento Asociativo al que pertenezco, por los fuertes recortes propuestos por el gobierno de Silvio Berlusconi en el proyecto de presupuesto 2009 para el funcionamiento de los consulados italianos y en general para todas las iniciativas destinadas a los italianos en el mundo.

Es sabido que la tutela de los derechos de los italianos residentes en el exterior no son, desde hace tiempo, una prioridad del Estado italiano. Pero hoy, como han señalado algunos de mis colegas parlamentarios de la oposición, este Gobierno, con el Presupuesto para 2009, actualmente en discusión en la Cámara de Diputados, ha eliminado la política italiana de sostén y apoyo a nuestra colectividad con una operación de recortes que, si no es debidamente corregida por el Parlamento, tendrá resultados devastadores.

Se trata de una clara decisión política: se recortan los gastos que este Gobierno considera superfluos. Surge la sospecha de que el centro derecha se quiere vengar del fracaso electoral en el exterior.

Para ahorrar algunos pocos millones de euros, la asistencia, la lengua y la cultura, la red consular, los servicios, los organismos representativos, en fin, el alma de Italia en el mundo sale mortificada. Una actitud política incomprensible y contraproducente.

A mí personalmente lo que me preocupa profundamente es el inminente escenario futuro que se caracterizará por la ausencia del Estado Italiano en América Latina.

En este cuadro no es fácil para los parlamentarios elegidos en la Circunscripción Estero traer a casa resultados satisfactorios. El Gobierno de Berlusconi ha decidido olvidarse de la emigración y los parlamentarios del centro derecha lo han aceptado.

De mi parte, puedo asegurar un compromiso serio y constante para tutelar lo mejor posible los derechos, intereses y reivindicaciones de la colectividad italiana en el exterior. Si el Gobierno nos lo permite, presentaremos enmiendas para corregir o eliminar los recortes a la emigración. Durante toda la legislatura honraré la confianza que me ha sido conferida por los electores con una decisiva batalla política y presentando propuestas de ley a favor de nuestra colectividad y con particular atención en América Latina.

Los problemas son muchos y muy serios, el trabajo por lo tanto no falta. Vamos a demostrar que tenemos un importante rol que desempeñar y que somos capaces de cumplirlo con honestidad y responsabilidad.

Senadora Mirella Giai