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Discriminación

El viernes pasado mientras asistía como docente al Seminario "Una herida histórica: Malvinas" organizado por la escuela Normal Superior N 36 "Mariano Moreno" en el espacio del Museo de la Memoria de la Secretaría de Cultura de la Municipalidad de Rosario, de hecho Seminario con muy buen contenido y nivel, mientras hablábamos de la discriminación que han sufrido los ex combatientes de Malvinas, en un corte del seminario, a las 16, pudimos asistir a otra forma de discriminación no menos repudiable.

Sucede que mientras hacíamos un intervalo en el Seminario, llegaba a la estación de trenes Rosario Norte un tren proveniente del norte de nuestro país supongo con destino a Capital Federal. Con desagradable sorpresa presenciamos como un empleado de la Secretaría de Cultura de la Municipalidad de Rosario, cerraba con llaves la puerta de acceso que da al andén de la estación de trenes, evitando de este modo que los pasajeros del tren puedan acceder al espacio cultural de la Secretaría.

Sinceramente no encuentro la razón para discriminar innecesariamente a los pasajeros del tren que no es ni más ni menos que gente de nuestro pueblo que viaja en tren porque quiere o porque no puede acceder a otro medio de transporte. ¿Será que este hombre y sus superiores suponen que los pasajeros no tienen derecho o no están en condiciones de acceder este espacio cultural?

Un dejo de nostalgia por tiempos pasados donde funcionaba la estación de trenes que desbordaba con pasajeros que arribaban de todo el país, donde solíamos ir con amigos a ver los trenes, se mezclaba con la bronca por la actitud deleznable de este empleado de la Secretaría de Cultura (¡Justamente de Cultura! Un espacio de todos y para todos), que espero haya sido una actitud personal y no una disposición de la Secretaría de Cultura de la Municipalidad, porque entonces sí que me preocuparía mucho más.

Me dio vergüenza como rosarino y como docente presenciar como una señora intentaba ingresar y no pude más que hacerle una señal que la puerta estaba cerrada con llave, separados por un vidrio, ella condenada al andén y al tren y yo del otro lado disfrutando del espacio cultural. ¿Por que yo sí y ella no? Deseo que Rosario sea una ciudad cultural, turística, inclusiva y ésta realmente no es la forma.

Arístides Ricardo Alvarez

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