Verdad, realidad

Es cierto, hace muchos años que los jubilados de Ansés vienen postergados. Con lo que tristemente podemos deducir que muchos de ellos han partido de este mundo llevando consigo el estigma de la injusticia, el no reconocimiento a una vida de trabajo completo con aportes jubilatorios acordes. Como argentina pido perdón por ello. Me origina bronca y, por qué no decirlo, un poco de vergüenza. Es como que los vamos dejando partir sin hacer nada. Sólo queda la lucha por los cinco millones que restan, que viven, que siguen palpitando el dolor de esta injusticia. Desde allí, quiero analizar la realidad como la única verdad. En agosto 2010 los jubilados cobraban de bolsillo 940 pesos, en setiembre 1091 pesos y se anuncia que cobrarán 1272 pesos a partir de marzo de 2011. Si recordamos que en años anteriores los aumentos fueron inferiores, podríamos al menos sonreír, pensar que ahora estamos mejor. Sería una burla más. No digo nada nuevo, todos somos conscientes de que esto es una verdadera afrenta a los abuelos. Por ello anunciar con todo descaro el aumento que no significa "nada" en la economía de los jubilados, y aclarar que en años es la primera vez que un gobierno aumenta tanto, me llena de tristeza. Compararse con los "malos" para demostrar que son "menos malos" es un oprobio (veto al 82 por ciento móvil del Poder Ejecutivo 2010). Evidentemente que no existe, ni existió en las esferas del actual Gobierno, la intención de ser justos con la clase pasiva y abonarles simplemente lo que les corresponde. Se acercan las elecciones. Muchas son las promesas que embanderan los partidos políticos. Voy a escuchar para decidir por aquellos que sean capases de explicarme cómo pondrán fin a esta barbarie con fundamentos y prontitud, porque todos sabemos, aunque algunos se hagan los distraídos, que la realidad los ubica en un lugar prioritario.

Edith Michelotti