Potencia en decadencia

Los argentinos nos enteramos que el primer ministro británico David Cameron volvió a defender lo indefendible. El titular de esta "burda potencia colonial en decadencia", como bien lo definiera la presidenta Cristina Fernández, dijo en el Parlamento de los anacrónicos usurpadores del siglo XXI, que mientras las Falklands (nombre utilizado por los violadores del derecho internacional para llamar a nuestras islas Malvinas) "quieran ser territorio soberano británico, seguirán siendo territorio soberano británico. Punto final de la historia".

La verdad que el nuevo émulo de Margarita Thatcher quiere tapar con la mano el robo efectuado a la nación Argentina hace ya 188 años. Los ingleses se pasan por donde no les da el sol, o su aburrida neblina, todas las resoluciones de la ONU en donde los "invitan" a negociar la soberanía de las islas Malvinas. Los ocupas no quieren sentarse a ninguna mesa de negociación ya que nunca se les dará la razón a los ladrones y mucho menos cuando el hurto lo cometieron a 14 mil kilómetros de su maldito lugar de origen. Los isleños, salvo uno que ya tiene el DNI argentino, desconfían de nuestro país. Está claro que los descendientes de los piratas británicos defienden y siempre van a defender a sus ancestros usurpadores. Lo llevan en la sangre y en los genes que heredaron por generaciones de los primeros saqueadores de nuestras Malvinas.

Daniel Ciúffoli

Ex soldado clase 1962

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