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Sangre

Sobre el proyecto presentado por la Diputada Provincial del Partido SI en el Frente Progresista Cívico y Social, Alicia Gutiérrez sobre "Tracción a Sangre", nos oponemos rotundamente a que la realidad de un sector enorme de la población provincial que vive de los Residuos Sólidos se reduzca a la "sustitución del uso de los caballos por otros medios". También repudiamos la fundamentación explícita en dicho proyecto de Ley sobre el maltrato animal, entendiendo a la misma como un hecho de discriminación y prejuicio sobre los sectores más vulnerables de la población santafesina. Hablamos de discriminación porque sólo se habla de maltrato animal cuando se habla de los y las carreras, pero no cuándo estos mismos animales son utilizados por otros sectores de la sociedad en pos de su entretenimiento y disfrute social. Y decimos prejuicio porque se desconocen las iniciativas que impulsamos hace años con nuestra población animal: jornadas de vacunación, entrega de libretas sanitarias, acopio de alimentos de buena calidad, etc. Estas actividades las realizamos sin el más mínimo apoyo de ninguna institución estatal y menos de las entidades proteccionistas, que son las primeras en oponerse a estos proyectos.

Nuestra realidad no puede ser reducida a la problemática de la tracción a sangre. Al contrario, necesitamos mejorar nuestra calidad de vida para pensar en el destino de nuestros animales.

Llamamos, como lo hemos realizado en otras ocasiones, a una mesa de diálogo que nos contemple como interlocutores válidos previo a la implementación de cualquier plan y/o proyecto para generar consensos de manera mancomunada. No queremos encontrarnos, una vez más, con representantes del pueblo discutiendo nuestro destino puertas adentro y a nosotros y nosotras resistiendo en las calles.

Cuando se enuncia que "la prioridad es proteger a los animales y atender las necesidades de las mujeres y los hombres que dependen de esta actividad para vivir", en ese orden, nos vemos en la necesidad de preguntarnos ¿cuánto importamos verdaderamente? ¿Por qué se priorizan las vidas animales -como si estuvieran en peligro- antes que las de nuestros y niñas, nuestras mujeres enfermas, nuestros abuelos que hace décadas trabajan en los carros? ¿Sólo importa nuestra seguridad cuando estamos arriba de un carro tirado de un caballo? ¿Qué pasa con los compañeros y compañeras que hacen kilómetros a pie? ¿Qué propuestas tienen para aquellos que meten su cuerpo dentro de los tachos de basura en los centros urbanos?

Federación Argentina de Cartoneros y Recicladores