Martes, 13 de febrero de 2007 | Hoy
La ministra de Educación, Adriana Cantero, ha declarado que el reclamo salarial de los docentes de $ 2.300 no es serio. Sin embargo, ese es el monto fijado como el valor de la canasta familiar, es decir, el mínimo imprescindible, hoy, para que un trabajador pueda vivir dignamente.
Pero si hablamos de seriedad, la ministra debería preguntarse por qué el salario docente y de todos los estatales de esta provincia está conformado por más del 60 % "en negro", contrariando todas las normas laborales. Que el básico del maestro de grado fue aumentado en el mes de enero de 2007 en $ 30, llegando a la suma de $ 380 (menos de la canasta de indigencia) luego del promocionado "blanqueo" anunciado por el gobernador Obeid.
Anuncia, sin ruborizarse, que ningún maestro ganará menos de $ 1.000 (apenas por encima de la línea de la pobreza) y proclama que el 12 % de aumento es un gran ¿esfuerzo? Esto cuando las estadísticas oficiales ubican a Santa Fe batiendo récord de recaudación, que por supuesto no se destina a Salud y a Educación (como se puede apreciar en el estado lamentable en que se encuentran nuestras escuelas y hospitales), pero sí a subsidiar proyectos de los grandes grupos económicos que se han enriquecido en esta provincia. Ratificamos, más que nunca, la necesidad de preparar un plan de lucha por nuestras largamente postergadas reivindicaciones, comenzando por el reclamo de los $ 2.300.
"Muni" Finkelstein
Tribuna Docente
Hemos exigido un inmediato aumento de salarios, el pase a planta de los trabajadores en negro y el fin de las paritarias truchas para dar paso a la democratización. El gobernador Obeid responde con un ofrecimiento que es burla a los trabajadores estatales de la provincia: aumento del 12 %.
No hace falta aclarar que el 12 % de salarios de hambre no es siquiera una "recomposición salarial". Como también, en cuanto al reclamo de regularización de la relación laboral de 5.000 trabajadores en negro del estado santafesino, no son las promesas de campaña y los "anuncios" los que pueden postergar el inicio de un plan de lucha y protesta generalizada en toda la administración pública provincial a partir de los próximos días. El gobernador Obeid y sus ministros mantienen una actitud autoritaria y abiertamente irresponsable frente a quienes sostienen con su trabajo el estado provincial. El gobernador Obeid y sus ministros insisten en negar el derecho de los trabajadores a discutir salarios y condiciones de trabajo generando ámbitos en los que más que diálogo son monólogos al que sólo asisten personajes como Maguid repudiado por la gran mayoría de los estatales.
ATE Rosario
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