El hombre se llama Guillermo Vaccarone, y dirige en la Liga Rafaelina de fútbol. Le tocó dirigir Bochófilo Bochazo de San Vicente y Sportivo Santa Clara de Saguier. En un momento del partido, dos jugadores rivales se tomaron a golpes de puño. Inmediatamente más jugadores de ambos equipos se fueron a las manos, se lanzaron patadas y se empujaban. Vaccarone se fue a un costado junto a sus colaboradores y fue anotando los números de los jugadores involucrados en la pelea. Cuando todo se calmó, el árbitro tomó una decisión por la que pasará a la historia del fútbol. Le sacó tarjeta roja a nueve jugadores de cada equipo. 18 en total. Obvio, el partido se suspendió por falta de jugadores en la cancha. El récord de expulsiones en un partido de fútbol lo tiene el árbitro William Weiller, de la Liga Paraguaya, quien mostró el cartón rojo a 20 jugadores en 1993.