La construcción del nuevo edificio de la Facultad de Psicología de la Universidad Nacional de Rosario empezó el jueves pasado. "A mediados del año próximo creemos que todas las asignaturas se van a desarrollar en el edificio, cuya primera etapa consiste, justamente, en la construcción del sector de las aulas", indicó el decano de la Facultad, Ovide Menim, mientras el vicedecano, Juan Carlos Coria, subrayó: "Estamos construyendo un edificio de una capacidad absolutamente notable, que satisface todas las expectativas no sólo de la carrera de grado sino también de las actividades de posgrado y del profesorado". El entusiasmo se explica en el diagnóstico del propio rector de la Universidad, Darío Maiorana: "Psicología es la facultad más nueva, aunque la carrera cumplió 50 años, desde que estaba en Humanidades- y es la que está en peores condiciones provisionales. Básicamente, porque está emplazada en un lugar que nunca fue pensado para dar clase, sino que eran galpones heredados de Arquitectura". El plazo para finalizar las obras es de 3 años.

Coria hizo historia, para subrayar el valor del emprendimiento. "El Consejo Directivo, desde 2005, mandó permanentemente resoluciones al Rectorado y en aquellos años obtuvimos muy pocas respuestas. Recién con la asunción de Maiorana pudimos concretar este proyecto", indicó.

Para el rector, se trata de un proyecto estratégico, que tiene sus plazos de ejecución. "El año que viene vamos a estar viendo los frutos de las gestiones, que son una solución definitiva y estructural para que tengamos, dentro de tres años, una Facultad de Psicología moderna, apta para dar clases, para investigar, con espacios internos libres porque se prevé que haya un gran pulmón central con lugar para estar, bancos y árboles. Así nos proponemos jerarquizar una Facultad que no tiene la infraestructura edilicia que corresponde a su cantidad de alumnos, el prestigio, la calidad de los graduados y los docentes y obviamente a los servicios que presta a la comunidad". Para Maiorana, el nuevo edificio potenciará "las tareas de investigación y fundamentalmente de extensión hacia la comunidad".

En ese sentido, Maiorana enfatizó que la construcción del edificio es parte de una política edilicia ambiciosa de la UNR. "A partir del año pasado nos propusimos dar una política de buscar soluciones estructurales y definitivas a casi 30 años de desinversión en infraestructura que tenía nuestra Universidad", indicó el rector, quien mencionó las negociaciones con la Nación. "Encaramos serias gestiones ante el Ministerio de Infraestructura de la Nación, el de Educación, y con fondos propios para tomar áreas que eran críticas. Así terminamos las instalaciones de gas en todas las Facultades, ya que había siete que tenían el servicio cortado, y también hicimos los trabajos de iluminación en toda la Siberia, donde había serios problemas de seguridad", enumeró Maiorana, quien indicó también que en la Ciudad Universitaria se planteaban "desidias varias. Todos saben que durante años no se cortaba el pasto ni se arreglaban las cercas perimetrales". En ese marco, el rector enfatizó que su gestión estuvo destinada a "terminar obras postergadas por muchos años, como la terminación de la cubierta de la Facultad de Arquitectura, que se inauguró el año pasado, después de 30 años sin completar". Entre los trabajos terminados, enumeró los cerramientos de la Facultad de Ciencias Agrarias, así como la recuperación de aulas de Paidopsiquiatría de Medicina y del subsuelo de la Escuela de Fonoaudiología".

Claro que habrá una transición. "Durante 6 a 8 meses convivirán la obra recién iniciada con las clases. El edificio tiene sus restricciones, y por eso hace 4 años se alquiló el anexo de Corrientes e Ituzaingo. Hemos hablado con todos los Decanos de las Facultades de la Siberia para que presten instalaciones en el mientras tanto -indicó Maiorana-, estamos constantemente monitoreando las necesidades para tener una transición de 8 ó 9 meses, hasta que podamos inaugurar el primer Pabellón, ya iniciado, lo cual va a dar una respuesta clara y definitiva". Como ejemplo, el rector indicó que la superficie total de la Facultad es actualmente de 2600 metros cuadrados, y el primer pabellón que construirán tendrá 2400. "Prácticamente, este sector va a cubrir todas las necesidades actuales", afirmó. Maiorana reconoció que en la transición "habrá incomodidades y problemas, pero hay un horizonte claro. Hace 3 años no había certezas, hoy sabemos que en muy poco tiempo vamos a tener instalaciones adecuadas". Consciente de las críticas que pueden surgir por los inconvenientes de la transición, Maiorana llamó a "no hacer caso de discursos y actitudes que siempre existen de grupos o de personas que intentan generar problemas cuando ven que los mismos se van solucionando".

Para Menim, en cambio, lo más destacable es que "el proyecto es excelente, y brinda la posibilidad de tener un edificio como el que merece la Facultad. La carrera ha cumplido más de 50 años, y desde hace mucho tiempo se independizó de Humanidades". Al mismo tiempo, y en relación con los plazos previstos, el decano de Psicología expresó: "El ritmo no lo disponemos nosotros, porque hasta la naturaleza interviene, cuando hay períodos de lluvia, pero aún así suponemos que en un año la primera etapa de construcción destinada básicamente a las aulas va a estar listo".

*Psicólogo. Coordinador Psicología Rosario/12. Consejero Graduado en Facultad Psicología.