La evolución tecnológica de la telefonía móvil fue demasiado para dos muchachos que ayer asaltaron un comercio del rubro en Montevideo al 5400. Entraron a las dos de la tarde y a punta de pistola encerraron al dueño en el baño del local. En un santiamén juntaron 60 celulares y escaparon. El comerciante llamó a la policía, pero fue un dato clave lo que apuró la resolución del caso: uno de los aparatos robados, integrado con sistema operativo Android, posee GPS, el sistema de rastreo satelital. Así fue fácil localizar el lugar adonde se encontraba el botín y, por consiguiente, sus apropiadores. Menuda sorpresa se habrán llevado estos jóvenes, de 23 y 26 años, cuando las patrullas los cercaron un rato después en Felipe Moré al 3900. La policía secuestró los celulares sustraídos, tres revólveres, la Yamaha YBR que usaron para el atraco, un handy sintonizado en la frecuencia policial, y el aparato que silenciosamente atrajo la persecución hasta los ladrones.