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Fue necesario que algún cercano colaborador del desprestigiado senador, le acercara unas encuestas sobre la imagen negativa del gobierno nacional en nuestra provincia, para que tomara la decisión de alejarse del Bloque K. Todos sabemos que fue parte integrante del Frente para la Victoria desde su inicio, ya que asumió con Néstor Kirchner como Presidente e integró sus listas, claro, en esa época era bueno ser K.

La falta de adversarios de consenso y la ley de lemas, lo llevaron dos veces a la gobernación. No creo que tenga que recordar que ambas fueron bajo el gobierno neoliberal de Carlos Menem. Su pragmatismo lo llevó a ser "el mejor alumno del menemismo" en todas sus facetas, y a aplicar las recetas de su padrino político y del FMI, que generaron la mas importante desocupación de la historia con el mayor volumen de corrupción.

Luego como senador fue un verticalista para votar todas las decisiones kirchneristas, supuestamente izquierdistas. En ambas ocasiones sus definiciones políticas comprometieron seriamente a Santa Fe. Tales como los amplios superpoderes al ejecutivo nacional o las modificaciones de la coparticipación en detrimento de la provincia de Santa Fe, sin ninguna oposición, ni declaraciones conocidas, y lo mas grave, ningún aporte a una planificación del sector agropecuario, al que, ahora, dice defender.

Claro, ahora viene el momento de la escenografía electoral.

Seguramente las encuestas lo hicieron mirar hacia ellas, y pensar que los santafesinos en su mayoría, quieren castigar la soberbia autoritaria del matrimonio K. Pero el solo hecho de no votar la resolución 125, no redime su total inacción y su complicidad. ¿Alguien conoce algún proyecto del Lole, previo a su despertar ante el avanzado conflicto del campo?

Creo que si ha de exponerse nuevamente a la opinión de los santafesinos, deberá aceptar que él y Obeid han sido responsables directos de la decadencia y postración de la provincia. No sólo por sus defecciones mas conocidas: privatizando el Banco Provincial y Obras Sanitarias; desmatelando la EPE, luego de no haber podido regalarla a capitales privados; abandonando a su suerte la ciudad de Santa Fe, ocasionando una dantesca inundación previsible; instalando represores o ministros de la dictadura; comprometido con los asesinatos de diciembre de 2001, evadiendo aquí su responsabilidad política, gracias a amigos y parientes de la Corte Suprema. Si no también, por ser ambos ex gobernadores, incapaces de dar agua potable a las poblaciones del interior; por dejarnos una salud y una educación ineficientes; por no integrar la provincia; por facilitar la concentración de la riqueza; por no planificar una política agropecuaria; por favorecer los bolsones de pobreza en centros urbanos que han generado una alarmante inseguridad.

El triunfo del Frente Progresista permitió advertir que se pueden encarar problemas estructurales que parecían insolubles durante 24 años.

El lo sabe. No puede caminar por las calles de Santa Fe. Algunas voces obsecuentes creen que esta especulación política lo llevará a catapultarsea un nuevo e imaginario estrellato. Los santafesinos tenemos memoria.

* Diputada Partido SI en Frente Progresista