La polémica que trajo una vez más el ex gobernador Jorge Obeid, alrededor del déficit provincial no alcanza para terminar de pintar una realidad del territorio. El déficit de 1.500 millones de pesos con el termina el 2011 es, según el gobierno, una brecha que puede ser cubierta por "arquitectura financiera". Y los 500 millones de rojo contemplados en el presupuesto 2012 que pasa los 30 mil millones de pesos tampoco debería ser una alarma estridente. Claro que depende de la concepción que se tenga en torno de los presupuestos públicos.

El socialismo siempre sobreentendió que debía estirar al máximo los gastos e inversiones del Estado, incluso al límite presupuestario en pos de desarrollar políticas públicas que alcancen estándares satisfactorios. En cambio, desde el peronismo y sobre todo desde el peronismo que orientó los destinos de la provincia en los últimos años, llegar al desarrollo de esas mismas políticas teniendo como límite los ingresos pautados, fue una cuestión central. Un acto de racionalidad política que los llevó a cumplir con los duros parámetros económicos de los '90 e incluso le alcanzó para defender la buena performance financiera santafesina en medio de la debacle del 2001: Uno de los pocos estados provinciales importantes que no emitió sus propios billetes de papel pintado que le sirvió a muchos para paliar el impacto profundo del derrumbe.

Con todo, hay que decir que peronistas y socialistas han logrado mantener a Santa Fe fuera del club de provincias deudoras a nivel nacional. Según un informe publicado este fin de semana, las provincias en su conjunto deberán cancelar en 2012 sus abultadas deudas con la Nación ya que opera el vencimiento de la tregua que se otorgó en 2010. Como señala el dicho, "no hay plazo que no se venza ni deuda que no se pague". En ese orden, los estados deudores necesitarán unos 27 mil millones de pesos para cubrir la totalidad de los pasivos. Muchos gobernadores ya comenzaron a trabajar sobre sus legisladores para que soliciten desde el Congreso una nueva prórroga al gobierno nacional. Por ahora, lo único concreto que hay son 15 mil millones de pesos de ayuda a las provincias, contemplados en el presupuesto nacional para 2012. Pero nada se habla de una nueva prórroga.

Santa Fe no integra ese club de desmanejos financieros que encabeza la provincia de Buenos Aires con la friolera de 24 mil millones de pesos de deuda. Le siguen Córdoba con 4.764 millones, Chaco con 3.410 millones, Formosa con 3.400 millones, Jujuy con 3.133 millones y Entre Ríos con 2.321 millones, entre las primeras, según el informe de la consultora Economía y Regiones.

Por el contrario, Santa Fe se jacta de ser acreedora del gobierno nacional por los compromisos contraídos al no transferir su caja de jubilaciones y por eso le reclama más de 4 mil millones de pesos a la Nación, en un pleito que se encuentra en la Corte Suprema de Justicia de la Nación. Por este tema, el gobernador electo Antonio Bonfatti ya anticipó que seguirá en la línea de reclamos del actual gobernador.

Una propuesta

Hablando de Hermes Binner, su idea lanzada hace pocos días para combatir la inflación, también disparó una polémica que continúa. Para el dirigente socialista una de las salidas sería "congelar precios y salarios por tres años" para ir frenando la escalada de precios. El ex candidato presidencial del FAP hizo de este tema su lei motiv de campaña, entendiendo que podía discutir por esa brecha, un tema caro a los intereses de los asalariados argentinos y, de paso, pegarle al gobierno en uno de sus flancos menos protegidos.

Como idea de campaña no estaba mal, sobre todo teniendo en cuenta que desde el gobierno nacional se concibe a la inflación como a un tema que puede crecer si se habla de ella. Por eso el celo puesto sobre los números del Indec y las críticas que se soportaron por esa decisiones.

Consultado el domingo por Rosario/12, el politólogo y economista de la UNR Diego Añaños aseguró que la propuesta del gobernador Binner era "vieja" y que contemplaba "algunos riesgos recesivos". De todas maneras, el profesional rescataba una parte de la propuesta del socialista. La que habla de los "tres años", ya que de esta manera "se concibe a la inflación como a un fenómeno procesual, en el que así como tarda un tiempo en tomar velocidad, también tarda en desacelerarse". Por eso el economista señala que "pensar en un período de tiempo razonable como punto de partida para una discusión con el gobierno nacional, puede resultar interesante". Y en esa dirección agrega que el gobierno nacional "tiene en Binner un interlocutor posible y válido".

Añaños agrega que una de las cuestiones básicas para entender a la inflación es comprender que se está ante un fenómeno muy complejo. Sobre todo teniendo en cuenta la realidad de los países emergentes como la Argentina, donde pensar un crecimiento del 7 u 8 por ciento anual sin inflación es más que una utopía. Y cuenta la anécdota del doctor que recibe al paciente que se queja porque corre y chorrea agua y tiene mal olor después de unas horas de gimnasia. Y el doctor le responde sencillamente, "usted está transpirando". Bueno, la transpiración sería la inflación tomado como un proceso tan natural como inevitable.

Cuentas de Mónica

La intendenta electa de Rosario Mónica Fein participó decididamente en la confección del proyecto de Presupuesto 2012 para remitir al Concejo Municipal. En ese sentido destaca que se mantiene sobre todo lo que es el destino del presupuesto mayormente orientado al gasto social que incluye a la salud pública rosarina, el rubro de mayor gravitación dentro del plan de inversiones del Estado local, como ya es tradición y marca de Rosario.

Sin embargo, han surgido cuestionamientos de parte de los concejales de la oposición que no son menores. Según denunció el edil del PPS y ex intendente Héctor Cavallero, el presupuesto 2012 no contempla el ritmo de inversión previsto para poder completar la infraestructura que falta de cloacas en los próximos diez años. Según el concejal, el compromiso era llegar a los 40 millones de pesos por año de inversión en la materia para poder cumplir con los compromisos asumidos en el plan integral aprobado para estas obras. Con todo, Cavallero que adelantó que va a señalar ese déficit aseguró ser partidario de que los ejecutivos cuenten con la herramienta del presupuesto para poder gobernar. Y disparó una chicanca contra la intendenta electa que "siendo diputada nacional dejó a la Presidenta sin el presupuesto 2011. Nosotros no vamos a hacer lo mismo aquí", sentenció.

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