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El gobierno de Antonio Bonfatti comienza una etapa clave del año que recien comenzó en muchos aspectos. Pero primero debe resolver sus diferencias con los estatales (diferencias de pesos) que sólo se arreglan con plata. Como pocas veces había ocurrido, los gremios que nuclean a los empleados del Estado santafesino rechazaron aún antes que los docentes la propuesta desdoblada que empezaba con una cuota menor a la del año pasado. El 15 por ciento primero, más el 9 por ciento después, más los 600 pesos fijos por única vez; en rigor, eran menos que el 19 por ciento más el 4 por ciento del año 2012. Así lo entendieron los gremios y no debieron enfrascarse en demasiadas discusiones para decretar la huelga.

No hace bien el gobierno en decir que "es la mejor propuesta porque es la podemos cumplir", pero se entiende la estrategia negociadora. Si hubiese empezado más arriba no tenía tampoco garantías de evitar el conflicto. En esta oportunidad incluso, el minisitro de Educación de la Nación, Alberto Sileoni jugó a favor de los ejecutivos provinciales en la negociación con los docentes. "Ninguna provincia está en condiciones de ofrecer por encima del 24 por ciento", dijo mezquino marcando el techo para que nadie se aleje demasiado del 22 en tres partes que él mismo había fijado días antes. Resultado: Hoy no empiezan las clases en casi todo el país.

La realidad de los docentes es muy distinta a lo largo y a lo ancho de la Argentina. Quizás sea cierto que Santa Fe tiene una de las mejores recuperaciones salariales en comparación con otros distritos, pero en rigor eso poco importa porque igual irá por el aumento aquel docente que gana 3.600 como en Capital Federal, como el que gana en promedio unos mil pesos más de salario inicial, como es el caso de esta provincia. A ninguno de los dos le alcanza para llegar holgados a fin de mes.

En Santa Fe los maestros ya le agradecieron a la gestión socialista las titularizaciones y la paritaria específica entre otras conquistas, pero en la dinámica de cualquier trabajador siempre el derecho adquirido opera como base para el crecimiento, se parta de donde se parta. Es un proceso tan legítimo como inevitable.

Los que antagonizaron de manera directa y sobre una cuestión de fondo, fueron el ministro de Economía Angel Sciara y el secretario general de ATE Santa Fe, Jorge Hoffmann. Mientras que para el dirigente gremial el gobierno santafesino tiene resto suficiente para pagar mejores sueldos porque "no ha parado de crecer la coparticipación que reciben de la Nación"; para el titular de la hacienda pública esa es "una afirmación falaz". Sciara dice, "claro que ha crecido la coparticipación. Pero porque también ha crecido la inflación y el gasto. Si no hubiese sido así todas las provincias estaríamos en un estado calamitoso". Como siempre en economía, no hay una sola manera de mirar los números, por más que muchos se empeñen en creer que se trata de una ciencia exacta.

La discusión de las partarias del Estado, que incluye a los municipales que tampoco se pusieron de acuerdo con los intendentes; se coló también en el debate por el Presupuesto 2013 para Santa Fe. El proyecto tiene la media sanción que le dio el Senado sobre fin de año, pero recién en estos días lo debaten los diputados. En esa dirección, la presidenta de la comisión de Hacienda de la Cámara, la diputada Marcela Aeberhard (100% Santafesino) llevó tranquilidad este fin de semana al gabinete de Antonio Bonfatti. "No vamos a dejar a Santa Fe sin presupuesto", dijo la legisladora pero advirtió que existe preocupación por la política salarial del gobierno y los refuerzos presupuestarios que pudieran necesitarse en la materia. "No sabemos bien de dónde saldra ese dinero extra que no está contemplado", aseguró Aeberhard que quiere junto a sus colegas, mayores precisiones del equipo que conduce Sciara.

Con agenda nueva.

Al parecer la seducción que generó en muchos concejales rosarinos ingresar en temas complejos y laberínticos como la narcocriminalidad, tendrá un tiempo acotado. Es que a la sucesión de reuniones a los que los llevó la intendenta Mónica Fein primero con el gobernador, luego con jueces provinciales, después con la Corte Suprema y los magistrados federales; tendrá hoy su punto cúlmine en Capital Federal cuando se encuentren con la jefa nacional de los fiscales, la doctora Alejandra Gils Carbó. Ayer se confirmó que del conclave también participará el flamante titular de la Procuradoría Adjunta para la Narcocriminalidad, el fiscal Félix Crous que había adelantado que tienen aquí en Santa Fe "una demanda concreta".

La vicepresidenta segunda del Concejo, la edila del PRO Laura Weskamp ya advirtió que "valoramos la reunión (con Gils Carbó), pero no debemos dejar de lado el rol del gobierno provincial que es quien debe brindarnos seguridad", aclaró aunque también descargó responsabilidad en la Nación en la lucha contra el narcotráfico en esta zona. Tambien la vicepresidenta primera del cuerpo, Norma López (FpV) pidió ayer desde un barrio de Rosario, en la seccional 15º, que "el municipio se haga cargo de la seguridad ciudadana".

Por un lado la intendenta Fein está satisfecha con este nuevo consenso que halló con la oposición en la ciudad y aspira a profundizar el espacio y llevarlo a otros temas, por ejemplo, en reclamos hacia la provincia. Pero por el otro, desde esa misma oposición no quieren dejar de advertir que la gestión del socialismo a nivel provincial no debe pretender disimular sus responsabilidades en el tema. Un ejemplo de ello es lo que pasó recientemente con el subcomisario Héctor Mendoza, defendido a ultranza por el Ejecutivo provincial y luego separado en silencio por no querer admitir las sospechas que pesaban sobre la subcomisaría de Nuevo Alberdi, fuertemente señalada por connivencia con narcos de la zona involucrados en la balacera contra militantes del Moviemiento Evita que generó un nuevo y duro cruce con la nación por el tema narcotráfico.

Pero fue ahora el propio Hermes Binner quien pareció maniobrar distinto sobre la cuestión. El ex gobernador volvió a citar el caso del ex jefe de policía encarcelado Hugo Tognoli, y en un reportaje radial no sólo pareció no defenderlo sino que bregó para que "se profundicen las investigaciones" y añadió que "seguramente será otro caso que quedará impune". Binner estaba hablando del hombre que él mismo llevó de la ex Drogas Peligrosas a la jefatura de la Policía, aunque el episodio le estalló en las manos después a Bonfatti.

El ex gobernador también lanzó la advertencia de que seguramente éste será uno de los temas de campañas y pronosticó "nuevos ataques contra Santa Fe". Sucede que el escenario que dejan los que "atacan" y los que "se defienden", es un terreno tan fangoso que resulta casi imposible advertir quién empezó y quien queda limpio.

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