Como era de esperar, la lista liderada por Hermes Binner obtuvo un cómodo triunfo en la PASO. La nómina encabezada por los dirigentes máximos del FAP y la UCR tiene proyección nacional en lo que será la disputa por la candidatura presidencial para el 2015. Binner espera razonablemente que la ventaja obtenida en estos comicios se amplíe en octubre a partir de lo que ocurrió en la discusión por el segundo puesto que en las encuestas previas daban afianzado al Frente para la Victoria y que el escrutinio de anoche echó por tierra. Miguel del Sel ha conseguido retener el segundo lugar en las preferencias de los santafesinos aunque no el porcentaje de votos obtenidos en la elección de gobernador que consagró a Antonio Bonfatti en 2011.

Si se repitiera la elección el 27 de octubre, la distribución de las 9 bancas que se renuevan por Santa Fe sería: cuatro para el FAP, tres para el PRO y dos para el Frente para la Victoria.

En términos de conservar sus bancas, el FAP repitió la elección de hace cuatro años, el PRO se alzó con tres bancas que fueron en el 2009 para el reutemismo residual (Daniel Germano, Carlos Carranza y Celia Arena) y el FPV duplica sus representantes teniendo en cuenta que en aquella oportunidad había ingresado solamente Agustín Rossi, al que se plegó ya en el parlamento el obeidista Juan Carlos Forconi, que ahora deja su banca.

Visto así, más que Binner es Miguel Del Sel quien tiene razones para festejar, si bien ha perdido casi 10 puntos en relación a su elección para gobernador. Binner también baja en su performance si se lo compara con la elección presidencial, y el FPV pone de manifiesto que el problema no es únicamente de los candidatos provinciales.

Las encuestas han fallado, el atenuante que ensayan quienes las realizaron es que las PASO tienen un voto volátil y agregan que no es trasladable idénticamente a la elección general. Algo de eso puede haber, pero las tendencias no parecen fáciles de modificarse. Las distancias entre los candidatos de las diferentes fuerzas no son tan estrechas y si bien se trata de otra elección, es muy difícil que se modifique la grilla.

Los objetivos del FAP son crecer un par de puntos que permitan aspirar a una quinta banca. Los del PRO retener ese porcentaje que le permitiría colocar tres diputados (siempre y cuando no se modifiquen las proporciones de las PASO) y las del FPV escalar al segundo lugar (de máxima) y no bajar de dos diputados (de mínima), como los que les correspondería con estos resultados provisorios.

Se ha cumplido con el trámite de las PASO, la atención de la ciudadanía sigue puesta en Salta y Oroño, como no podría ser de otra manera.