Los rápidos encuentros que se sucedieron el viernes en los últimos días entre el secretario de Comercio Guillermo Moreno y autoridades de las Confederaciones Rurales Argentinas (CRA), no lograron levantar el paro nacional agropecuario que se extenderá del 22 al 25 de este mes. Pero, como se ve, sí llamaron la atención del gobierno que no desea tener enfrente a todo el campo junto por primera vez desde que comenzó su gestión. Sin embargo, desde las entidades ruralistas, le hicieron ver a los enviados del presidente que hay predisposición para retomar el diálogo después de la medida de fuerza. Desde esta provincia, el titular de Carsfe Manuel Cabanellas, aseguró que "lo que nosotros recogemos entre los productores es una indignación muy grande, así que si no hay propuestas concretas de parte del gobierno; se probable que las medidas sigan".

Cabanellas y también desde la Sociedad Rural de Rosario; señalaron esta semana que esta medida de fuerza -en realidad- comienza "unos tres meses atrás, con los ganaderos a la cabeza" en abierta oposición a las medidas del gobierno restringiendo las exportaciones. Esto, "no sólo generó un perjuicio a los productores ganaderos que, como todo el mundo sabe, no somos generadores de precios sino tomadores. Sino que también generó una crisis en varias industrias derivadas como las de jabones y cueros".

Pero, en definitiva, lo que comenzó como una crisis ganadera, terminó por conformarse como una crisis general del agro a partir de disposiciones que después terminaron prejudicando, entre otros, también a los productores de trigo y a los lácteos.

Por eso para Cabanellas, "este es un paro integral que involucra a todo el agro". Más que nada, el dirigente santafesino que integró la conducción de CRA durante varios años; estaba dando una respuesta a los dirigentes de la Federación Agraria Argentina (FAA) que, a pesar de haber pasado a la oposición al gobierno después de varias "desilusiones"; ponía en duda el verdadero carácter de esta medida nacional. "Este es un paro con un claro sesgo ganadero", había dicho el titular de la Federación, Eduardo Buzzi. Sin embargo, Cabanellas aseguró que "nosotros respetamos lo que puedan pensar todas las entidades, pero por los contactos que nosotros tenemos con muchos productores de la federación, hay coincidencias en todos los reclamos que estamos haciendo".

De todas maneras, las bases de Federación Agraria cerraban ayer la ronda de asambleas regionales que puso en debate el rumbo del gobierno nacional en materia agropecuaria. Tras el crítico mensaje de los primeros siete encuentros, celebrados el sábado 8, otros siete cónclaves regionales contribuirán a definir la posición de la entidad. El Consejo Directivo Central se reunirá el próximo viernes 21 para evaluar las conclusiones de estas asambleas y resolverá en consecuencia".

Por el clima que hay entre los productores, que fue transmitido por los dirigentes de las entidades al gobierno, "este paro de tres días no es una medida demasiado virulenta. Es lo que se pudo organizar y lo que salió consensuado, porque había posturas mucho más críticas todavía", dijo una fuente consultada en los últimos días.