Un grupo de estudiantes tomó ayer por la mañana la sede de Gobierno de la Universidad Nacional de Rosario y exigió la renuncia del rector, Darío Maiorana, por haberle pagado una indemnización de 30 mil pesos al represor Jorge Walter Pérez Blanco. Los estudiantes junto a organizaciones defensoras de los Derechos Humanos se movilizarán hoy hasta la facultad de Bioquímicas, donde está prevista una reunión del Consejo Superior para tratar el tema. Guillermo Grigioni, consejero estudiantil y uno de los participantes de la toma del Rectorado, señaló a Rosario/12 que "la Universidad debería tener un compromiso con el esclarecimiento de los crímenes de lesa humanidad, y por eso estamos pidiendo que Maiorana no siga al frente de la Universidad, ya que quedó demostrado que mintió y ocultó para tratar de justificar lo que había hecho". Maiorana, el vicerrector Eduardo Seminara y el secretario general, Darío Macía, repudiaron la toma estudiantil y expresaron que "las autoridades de la UNR han tomado la firme decisión política de avalar la participación activa de la Universidad como querellantes en las causas de violación a los derechos humanos".

Grigioni explicó que tomaron la Sede de Gobierno de la UNR, en Maipú al 1000, exigiendo que "haya un cambio en el rumbo de la Universidad en la actitud que ha tomado en relación a las cuestiones de Derechos Humanos, que estallaron a principios de noviembre por el caso de Pérez Blanco, en el que el rector Maiorana definió, en forma unilateral y sin consultarle a nadie, pagarle 30 mil pesos al represor".

El consejero estudiantil agregó: "Queremos que la Universidad pase a tomar una ofensiva en relación a los juicios contra la impunidad, que pasarán a juicio oral el año que viene; que se constituya como querellante para que se pueda castigar a esta persona. Y que Maiorana, como principal responsable de lo que está pasando con Pérez Blanco, sentándose a negociar con un torturador y mintiendo diciendo que tenía la obligación de hacerlo por un fallo de la Corte Suprema, renuncie".

Grigioni dijo que si Maiorana no renuncia, pedirán hoy en la reunión del Consejo Superior que "se le inicie un juicio académico a él y a todos los responsables de haber hecho la barbaridad de haberse sentado con un represor". La idea de los estudiantes es mantener la toma, "al menos hasta saber qué decide el Consejo Superior".

En tanto, las autoridades de la UNR, repudiaron a través de un comunicado la toma "realizada por un sector minoritario de menos de 50 estudiantes (sobre un total de 74 mil) a la Sede de Gobierno de la Universidad en el preciso momento que la Universidad Nacional de Rosario trabaja conjuntamente con distintos sectores sociales y agrupaciones defensoras de los Derechos Humanos en la creación de una Comisión que lleva adelante las medidas necesarias para que la Universidad se pueda constituir en querellante en las causas por violaciones a los derechos humanos durante la última dictadura ante los Tribunales Federales".

En otro párrafo del comunicado se expresa que "las acciones llevadas adelante por las autoridades son conocidas por todos, tanto es así que la totalidad de los miembros de la comunidad universitaria han tenido acceso a los expedientes, grabaciones u otros materiales que se encuentran en la causa Pérez Blanco iniciada en 1998. Queda claro que aún repudiando las decisiones de la Justicia se ha decidido continuar con la línea institucional inaugurada oportunamente por el rector Ricardo Suárez para cumplir con lo que los fallos ordenaban".

Las autoridades de la UNR convocan a "todos los claustros, a las organizaciones sociales y políticas comprometidas y, especialmente, a aquellos que llevan una larga lucha contra la impunidad reclamando Verdad y Justicia a apoyar dicha iniciativa. El juicio y castigo a los culpables, el sufrimiento de los familiares de las víctimas así como de los sobrevivientes de la dictadura no merece diluirse en lógicas mezquinas, en ventajas de grupos o en ambiciones electorales de algunas

agrupaciones estudiantiles".

El comunicado firmado por el rector Darío Maiorana, y el vicerrector, Eduardo Seminara, indica que "una vez más el Partido Comunista Revolucionario (PCR) y su brazo estudiantil ALDE, resuelve actitudes violentas repudiadas por la comunidad, tomando la Universidad un día previo a la aprobación de la Comisión Permanente de la Memoria por parte del Consejo Superior y evitando el funcionamiento de las instituciones elegidas democráticamente por todos los claustros universitario".