Domingo, 17 de febrero de 2008 | Hoy
CIUDAD › ESTA SEMANA CONVOCAN AL CONSEJO MUNICIPAL DE SEGURIDAD URBANA
El secretario de Gobierno Ghirardi dijo que el Consejo debe trabajar en forma coordinada con la Provincia y la Policía.
Por Alicia Simeoni
El Consejo Municipal de Seguridad Urbana será convocado la próxima semana desde el Ejecutivo rosarino con la intención de comenzar a fijar las estrategias que tendrán como punto de partida el armado de juntas distritales. Esos espacios en cada uno de los sitios que hacen a la descentralización del municipio llevarán adelante políticas de prevención, trabajarán por lograr la participación consciente que se invoca como construcción de ciudadanía y colaborarán en realizar los diagnósticos de situaciones y necesidades de cada barrio. En estos términos explicó el secretario de Gobierno Horacio Ghirardi el impulso pedido por el intendente Miguel Lifschitz a un nivel de organización que "no tiene ni puede tener la pretención de resolver todos los problemas de inseguridad, pero sí funcionar como soporte con las políticas que la provincia encara". Ghirardi no utilizó gradilocuencias al hablar del consejo creado por una ordenanza del año 2003 y tampoco dejó de tener en cuenta que se requiere de trabajos interdisciplinarios que involucren a los distintos ámbitos del Estado, esto es Nación, provincia y municipio, para abordar la problemática de fondo. El Consejo de Seguridad deberá interactuar con las autoridades santafesinas y con la policía.
Ghirardi explicó a este diario que tras un pedido del intendente Lifschitz se le dará un funcionamiento sistemático y periódico al Consejo Municipal de Seguridad Urbana creado por ordenanza del año 2003. Esa instancia está integrada por el intendente y parte de su gabinete, entre ellos el secretario de Gobierno, el presidente del Concejo Municipal y otro concejal que se designe con esa finalidad que deberá coordinar las acciones con las autoridades policiales y con el propio Ministerio de Seguridad de la provincia. El Consejo tiene como tareas de la prevención, la construcción de ciudadanía y el diagnóstico de lo que sucede en los distintos barrios de la ciudad para darse una estrategia a nivel de los distritos.
El secretario de Gobierno trató de ubicar en una justa dimensión las expectativas que deben ponerse en la iniciativa municipal: "No hay que centrar en estas instancias todas las ideas en cuanto a resolver el problema de la inseguridad. Es una forma más frente a una temática tan compleja pero la participación de la gente, el vínculo con las autoridades del gobierno y de la policía puede sumar a tener una información más precisa y un diagnóstico más claro como municipio".
Ghirardi recuerdó que el municipio no tiene competencia directa sobre las políticas de seguridad pero también admite que sí existe el interés por hacerlo e "indudablemente hay otras expectativas que genera el nuevo gobierno de la provincia como ya lo muestra la creación del Ministerio de Seguridad y de la Secretaría de Seguridad Comunitaria". Ghirardi agregó que "hay que tener en cuenta que desde el nivel provincial se tiene una fuerte inserción en los barrios, por tanto nuestra acción significará ser un poco soporte y no estar ajenos a una de las principales demandas de la población"
Ghirardi también se mostró claro en cuanto a que para los niveles de inseguridad que existen se debe hacer la indispensable conexión con la crisis social y la exclusión. "Por eso, dice, son necesarios niveles de mayor equidad social y deberían articularse las políticas de los tres niveles del Estado en busca de terminar con la exclusión absoluta en lo económico, educativo, laboral y sanitario. Los mismos especialistas plantean que el inicio del delito está intimamente asociado al consumo de drogas y entonces la aplicación de las políticas públicas deben ser integrales".
"La semana que viene podemos tener en funcionamiento ese Consejo Municipal de Seguridad Urbana para diseñar políticas".
-Hay experiencias acerca de formas de organización destinada a la seguridad urbana que no tuvieron buenos resultados ni tampoco buena inserción en los barrios. Prácticamente se concluia sólo en algunas charlas de los vecinos con el comisario de la seccional correspondiente.
-Por eso es que decimos que esta no es la política total para la seguridad pero sí un soporte que puede colaborar.
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