"Es irrazonable establecer en forma obligatoria un modelo de cogestión sindical en la materia, pues la responsabilidad organizacional, patrimonial y jurídica es del empresario". La frase pertenece al comunicado de la FISFE (Federación de Industriales de Santa Fe) que repitió ayer su presidente Carlos Capisano en referencia al proyecto de ley sobre Comites de Salud y Seguridad, enviado por el Ministerio de Trabajos provincial. El empresario también planteó que el tema es jurisdicción nacional y que al ser provincial influye sor los los costos operativos. "Si otra provincia no lo tiene quedaríamos fuera de competencia", apuntó. La respuesta no tardó en llegar de boca del responsable de la cartera laboral y mentor de proyecto Carlos Rodríguez: "Si su preocupación por la higiene y seguridad, es tan importante nos hubiese gustado ver el manifiesto de FISFE por los seis muertos en lo que va del mes. Pero estos seis muertos no fueron motivo de declaración alguna, así como tampoco lo fueron las industrias sancionadas. De pronto aparece esta manifestación de anacronismos, realmente preocupante porque si este anacronismo intelectual lo llevan a la productividad nos va ir mal también en ese punto". Para Rodríguez, "es falso que esto implique una cogestión con los sindicatos".

En el marco de una reunión plenaria realizada en Rosario, que convocó a más de 70 dirigentes provinciales de la central fabril, los empresarios resaltaron calificaron de anticonstitucional el espíritu del proyecto de ley que ya llegó a la Legislatura.

El planteo de Fisfe señala que "propiciamos y alentamos firmemente el mejoramiento de las condiciones de higiene y seguridad en el ámbito laboral, y por ende el resguardo de la seguridad y salud de los trabajadores como lo venimos haciendo conjuntamente con el sector desde hace muchos años. Pero creemos que no es a través de este proyecto de ley que se van a lograr los objetivos supra mencionados.

También agrega en ese texto que "es irrazonable establecer en forma obligatoria un modelo de cogestión sindical en la materia, pues la responsabilidad organizacional, patrimonial y jurídica es del empresario. Por ende, los Comités Mixtos, cuya constitución avalamos, sólo pueden ser el resultado de la negociación colectiva y no de la imposición legal".

Para la FISFE "el proyecto en análisis resulta palmariamente Inconstitucional atento a la pretensión de asunción de la Provincia de materias expresamente delegadas al Gobierno Federal". Asimismo "es violatorio y contradictorio de sistemas normativos vigentes en nuestro país.

Por su parte el virtual ministro de Trabajo Rodríguez remarcó que "es absolutamente inviable la crítica de que existe una cogestión sindical con la que cuestiona el proyecto, porque si asi fuera esta es la realidad de hoy de las empresas en Brasil, Chile, Uruguay, Estados Unidos y países europeos, y la verdad no creo de ninguna forma que lo vean así, Esta gente está fuera de época y de lugar, algo normal en una estructura conservadora que tiene resistencia al cambio, tal como la que mostraron los conquistadores que llegaron a América y terminaron contagiando a las poblaciones originarias con enfermedades propias".

"Por otro lado tenemos antecedentes legislativos de este país, como el Código de salud y seguridad en la minería sancionado el año pasado y el reglamento de seguridad en la TV por cable que establecen el tema de comisiones de salud".

Finalmente Rodríguez confesó estar convencido de que "FISFE tuvo una mala asistencia técnica, y no mala voluntad, en este análisis, porque de proponerselo podría tener acceso a distintas experiencias mundiales como en Inglaterra sobre el funcionamiento de estos comités de salud y seguridad. Y se hubieran dado cuenta del resultado: adhieren al proyecto las empresas que quieren tener mayor seguridad en el trabajo".

Un dato paradojico: Capisano es propietario de una metalúrgica Acerías 4C en Las Parejas, donde a finales de la década del 80 se echó mano a los comités mixtos de seguridad para terminar con la llamada "industria del juicio". Curiosmante por estos días desde la misma empresa se convocó a la UOM para volver a implementar el proyecto.