Manifestantes del Movimiento Independiente de Jubilados y Desocupados (MIJD), que conduce Raúl Castells, protestaron ayer frente a la Municipalidad de Rosario y marcharon hasta la sede de la Ansés en reclamo de la entrega de viviendas por parte del Estado Nacional. Pero el carismático dirigente nacional, ahora instalado en Rosario, no estuvo en la movilización.

"Queremos que la Nación, la Municipalidad y la Provincia se pongan los pantalones y cumplan con la cesión de las 11 mil casas que corresponden a Santa Fe", expresó Luis Báes. Los referentes del movimiento denunciaron que las casas correspondientes al plan federal deberían haberse entregado en 2008. De hecho, la provincia había denunciado la subejecución del plan federal de Vivienda. La propia directora provincial de Vivienda, Alicia Pino, denunció que la Nación dejó 5.500 viviendas del Plan Federal I sin terminar. "La clase media está llegando a la pobreza por la falta de trabajo y encima el Estado no concreta las promesas que nos pueden permitir tener la casa propia", concluyó el militante.

Los manifestantes -unas 50 personas- cortaron el tránsito con un camión con altoparlantes y pidieron ser atendidos, pero no tuvieron éxito. Debieron irse a su casa como llegaron.