Aunque de manera parcial, el Concejo comenzó ayer a analizar el nuevo cuadro tarifario para los taxis. Los ediles integrantes de la Comisión de Servicios Públicos debatieron el primer estudio de costos del Ejecutivo que sugiere un aumento promedio del 16 por ciento. El mensaje complementario, que incluye la actualización salarial de los peones para el segundo semestre, no llegó aún al Palacio Vasallo. El jefe del mayoritario bloque socialista, el concejal Manuel Sciutto admitió que todavía "no hay consenso con todos los bloques en torno al aumento final que se otorgará y su modalidad. Lo que tenemos por seguro es que este jueves no se tratará en el recinto".

Formalmente ayer fue el primer debate en Servicios Públicos respecto a la readecuación tarifaria: se analizó el mensaje de la intendencia con el aumento sugerido que promedia el 16 por ciento. Pero el segundo mensaje, que debe tener en cuenta los incrementos salariales a peones no llegó y eso demorará el tratamiento del tema ya que la alternativa que más evalúan los ediles es, como anticipó Rosario/12, aumentar de manera desdoblada la tarifa: un 16 por ciento antes de fin de mes y entre un 5 y un 7 por ciento en noviembre. "No creemos conveniente reabrir la discusión dentro de cuatro meses", justificó Sciutto para después confirmar que esta semana no se debatirá la temática en el recinto.

Por su parte, el intendente Miguel Lifschitz defendió ayer las sanciones aplicadas a taxistas que no cumplen con las horas mínimas de circulación. "Somos los primeros interesados en que se cumplan los horarios, por eso estamos haciendo una verificación muy estricta", dijo respecto a la detección de medio centenar de unidades.

"Hemos aplicado sanciones importantes en los últimos tiempos y lo seguiremos haciendo, porque el taxi es un servicio público, por lo tanto hay que adecuarse a las normas", agregó.