Sábado, 30 de abril de 2011 | Hoy
CIUDAD › ENTREVISTA EXCLUSIVA A RUBéN GIUSTINIANI, PRECANDIDATO A GOBERNADOR DEL FRENTE PROGRESISTA
Así respondió Giustiniani cuando se le preguntó por el futuro del socialismo santafesino tras las internas donde competirá con Bonfatti. "Las primarias enriquecen la democracia", agregó.
Por Sonia Tessa
El precandidato a gobernador del Frente Progresista Rubén Giustiniani no se aparta ni un instante de la posición de evitar la polémica y de cultivar el tono propositivo. Elude cualquier respuesta que pueda sonar crítica al gobernador Hermes Binner y más bien prefiere dejar una imagen de continuidad, cuando habla de la necesidad de impulsar una Reforma Tributaria que los candidatos de los diferentes partidos debieran acordar antes del 24 de julio. Responde "claro" cuando se le pregunta si es similar a la planteada por Binner, y afirma que "aquellos que más ganan deben tributar más". Sólo en un instante -cuando se le refiere que el gobernador habló de un partido participativo, en contraposición con otro más cerrado que él encarnaría- afirma: "Esa discusión atrasa, hoy todos los partidos son de puertas abiertas". También apunta que "los tribunales ideológicos por suerte han quedado como parte de la historia, nadie puede sentirse más socialista que nadie, estamos en un partido donde los afiliados tienen la palabra, como en la sociedad son los ciudadanos los que votan". Ninguna pregunta le hace perder la compostura, y prefiere atrincherarse en la "rendición de cuentas" de su actuación como senador nacional. Sobre el "efecto Cristina", asegura que "no será determinante" en Santa Fe aunque aclara que "como gobernador no se puede ser opositor, porque hay una necesidad de articular políticas". ¿Las áreas en las que hizo propuestas son aquellas que Binner desatendió?
No para nada, pensamos que el gobierno en estos tres años y medio ha hecho muchas cosas, pero que viene remontando una situación, por ejemplo en el tema de los servicios públicos, de décadas de desinversión. Esto no se cambia del día a la noche, lo que sí, desde la lista Ganamos Todos estamos en condiciones de darle un fuerte impulso, por eso de una manera concreta estamos planteando cuál es nuestro compromiso para los próximos cuatro años.
Usted eludió las críticas, ¿pero no le parece que la gente tiene derecho a saber por qué hoy van a internas?
Claramente, el sistema de primarias enriquece la democracia, la primaria le quitó el poder que tenía el dirigente para designar a los candidatos y se lo puso en manos de la sociedad. El segundo punto es la diferencia de trayectorias: yo soy senador nacional, pongo como rendición de cuentas de mi actuación la lucha por el 82 por ciento móvil para los jubilados, la reducción de la mayoría de edad de 21 a 18 años, el haber trabajado con los productores agropecuarios para obtener 30 millones de fondos federales para cuando se produjo la sequía.
Parece estar contestándole a Binner, que lo acusó de no haberse interesado nunca en la gestión de Santa Fe.
Precisamente estoy rindiendo cuentas de eso. Lo que tenemos que hacer y en esto nos cabe a todos las generales de la ley, cuando nos presentamos a una candidatura, es rendir cuentas de lo actuado y es lo que yo hago todos los días.
¿Su sector se sintió discriminado en la conformación del gobierno?
Nosotros estamos dentro de una construcción política que lleva más de 20 años en la gestión, donde cada uno que ha debido en su momento llevarla adelante ha tenido la mayor responsabilidad de designar sus colaboradores y el partido siempre ha puesto el hombro a eso, y de hecho ha sido ratificado en el cargo de presidente de la Cámara de Diputados de la provincia Eduardo Di Pollina, que fue quien llevó adelante todas las políticas del gobierno provincial en la Legislatura. Hemos conseguido leyes muy importantes, las de medio ambiente y condiciones de trabajo y la ley de paritarias docentes.
La gestión de Binner afrontó un momento crítico como fue la crisis financiera de 2009. Hoy la situación presupuestaria es otra ¿qué posibilidades de gestión ofrece esa mayor solvencia?
Tenemos que hacer un acuerdo entre todos los candidatos de todos los partidos, del Frente, del justicialismo, para una reforma tributaria en la provincia de Santa Fe que todavía está pendiente.
¿En los términos que la planteó en su momento Binner?
Claro, que paguen más los que más tienen y que más ganan, que no sea de castigo a la producción ni a las pymes, pero sí que tributen los sectores que tienen capacidad económica y debe ser una reforma tributaria justa.
¿Se siente en desigualdad de condiciones para afrontar la campaña al competir con un intendente, como Mario Barletta y el candidato del gobernador, que es Antonio Bonfatti?
Claramente las situaciones son diferentes, no hace falta que yo las detalle porque claramente están a la vista, pero nos sentimos bien en la campaña, sentimos un buen acompañamiento de la gente. Si podemos transformar la adhesión de la gente que sentimos en la calle en votos, seremos elegidos el 22 de mayo para representar al Frente Progresista en la parte más difícil que después queda que es ganarle al justicialismo el 24 de julio.
¿Usted podría ser un candidato más cómodo para el PJ que Bonfatti?
No nos preocupa.
¿Cómo funcionará en Santa Fe el efecto Cristina?
Evidentemente el contexto nacional influye, pero Santa Fe, con todo el respeto que me merece, no es Catamarca ni Chubut. En esta provincia, con toda la ola alfonsinista de 1983, ganó el justicialismo. O sea que Santa Fe tiene una fuerte identidad propia, creo que ese contexto nacional no es para nada determinante, considero que el Frente está en totales condiciones para renovar sus credenciales en la población el 24 de julio y seguir gobernando Santa Fe.
Parece haber muchas heridas abiertas en los militantes socialistas. ¿No corre riesgos la continuidad del Partido?
En absoluto, en el sentido de que siempre la voluntad popular consolida y fortalece, nunca debilita. Nosotros nunca hemos descalificado ni hemos desacreditado ni hemos atacado a nadie, y hemos renovado siempre nuestro compromiso de continuar trabajando por el Frente Progresista y el socialismo en Santa Fe.
¿Cómo se plantea la relación con el gobierno nacional, teniendo en cuenta que tanto Binner como el intendente Miguel Lifschitz siempre expresaron una posición menos opositora que la suya?
Es que son planos institucionales diferentes. No puede ser un gobernador, de la bandería política que sea, opositor al gobierno nacional, porque existe una necesidad de articulación de políticas que obliga a los funcionarios nacionales, provinciales y municipales a trabajar juntos. Si uno habla de políticas sociales, hoy tenemos la Asignación Universal por Hijo. Nosotros vemos su insuficiencia, y consideramos que el combate a la pobreza lo tenemos que hacer de la mano de la política social existente. Si uno habla de política de seguridad, no vamos a combatir el narcotráfico si no es articulando la policía provincial con la federal, gendarmería y prefectura. Si hablamos de políticas de vivienda, tenemos que tener un propio plan agresivo santafesino pero también articularlo con los planes federales de vivienda existentes, o sea que cada una de las políticas nos obliga a los funcionarios en los cargos ejecutivos a llevarnos bien y a dialogar hasta con quienes no quieren dialogar, siempre sobre la base de la defensa de nuestros derechos, de reclamar los fondos que nos corresponden por derecho propios, que es una coparticipación justa.
El precandidato del Frente para la Victoria, Agustín Rossi, dijo que no corresponde la devolución de los fondos de Ansés y consideró que el gobernador hizo el reclamo ante la Corte "para la tribuna".
No comparto en absoluto. Acompañé a Binner en la presentación de la Corte, nos corresponden los fondos por derecho propio. El gobierno nacional debe respetar el artículo 7 de la ley de coparticipación federal que fija un piso del 34 por ciento, hoy la Nación se apropia del 75 por ciento violando este artículo por lo tanto, más allá de la bandería política, porque además de Santa Fe hay diez provincias más que están con reclamos de distinta naturaleza ante la Corte, por fondos federales y más allá de coyunturalmente el gobierno de Cristina, es necesario que el país federal no sea letra muerta en la Constitución.
¿Qué área del gobierno de Binner le gustaría conservar tal como está?
Me siento compenetrado con todos los sectores del gobierno. Podría hablar bien de varios y soy amigo de todos los ministros. Sería injusto de mi parte hablar bien de uno.
Binner dijo que decidiste tu candidatura de forma inconsulta, ¿estaba quebrado el diálogo en ese momento?
Es que el sistema de primarias hoy da la legitimidad a cualquier grupo de militantes, de afiliados, a cualquier colectivo dentro de las distintas organizaciones para presentar su candidatura. Esto es lo que hay que entender, se le ha quitado el monopolio a los partidos para designar a los candidatos y por lo tanto son legítimas las propuestas que surjan de la mano de la participación de grupos de afiliados y por lo tanto no se trata de medir quién tiene más, menos, eso lo va a medir la sociedad el 22 de mayo eligiendo la mejor propuesta.
Pero el Partido Socialista siempre fue muy orgánico y funcionó por consenso.
La ley de primarias abiertas tiene apenas tres elecciones, esta es la tercera vez que se pone en funcionamiento. Hay una práctica democrática dentro del PS, por la cual cuando no hay consenso se tiene que votar. Yo soy presidente del partido nacional por 30 mil votos de afiliados del partido que me eligieron entre dos listas, hubo dos listas con distintas propuestas, confrontando debates ideológicos y políticos.
Pero la lista que perdió parecía más marginal al funcionamiento del partido.
Los tribunales ideológicos por suerte han quedado como parte de la historia, no hay tribunales ideológicos, nadie puede sentirse más socialista que nadie, estamos en un partido donde los afiliados deciden y tienen la palabra como en la sociedad son los ciudadanos los que votan y deciden.
Binner dijo que ellos quieren un partido más abierto y ustedes proponen uno más centrado en los cuadros.
Ese es un debate que atrasa, hoy todos los partidos son de puertas y ventanas abiertas, y el PS es un partido donde cada afiliado desde el día que asume la afiliación tiene plenos derechos como cualquiera que hace 20 años que está en el partido. Eso lo sabemos todos.
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